Domesticando a León

na Ca

manas

re levantarse, mi cabeza quiere estallar de la cruda que traigo del día anterior. Decidí venir a la luna de miel, después de que Tadeo me humillo dejándome sola en el altar. Más bien deci

en la puert

de la cama, todo esta en desorden, ropa en el piso, botellas de agua, em

en la puerta! se escu

y! —grito

mi hermana Daniel

co. Me giro rápidament

—le pregunto hac

tre las botellas y la r

sto no puede continuar así, tienes que regresar a casa —dice con voz severa mientras

rían en mi cara por lo que el

mi cabeza acariciando mi cab

la de los dos, no sólo de ti, Ximena, escúchame —la miro en silencio —tienes que regresar a casa ahora, he venido por ti, te necesitamos, en la oficina to

apá no esta

rmana

jó toooodo, absolutamente todo a un desconocido, al

daron, él falleció apenas hace dos meses de un infarto fulminante, fue una sorpresa para todos, siempre vivió solo no t

í

tío Eugenio t

se encoge

icina, él fue en busca del supuesto hijo del tío Eugenio lo va a traer para que se haga la voluntad del

beza con in

extraño que no sabemos quien sea a la empresa a p

clamo a mi hermana quien son

bemos quien es el hijo de Eugenio ni con que

éndose de pie y saltand

que traje a la maleta. Después de dos horas abordamos un avión con destino a Monteverde, ciudad indu

Hern

doza me ha dejado una herencia? —suelto de manera irónic

icina que hemos adaptado en un rinconcito del taller donde tengo un escritorio una silla para que el cliente se sien

n los dedos de mi mano —no conozco ni conoc

necesitamos, en el testamento no se especifica si eres su hijo o no, sólo viene tu

ando lo que me

oco tiempo que mi hermano Paco naciera. No entiendo nada, mi madre

una equivocación, no creo que sea yo l

ente a mí se

voque, pero te dejaré por ahora, necesitas asimilar es

con s

un hombre que me ha dejado una herencia como si fuera

re hasta la pue

pirisnais? —escuchó la voz de mi mejor amig

ojo de

lido, regresemos a trabajar que aún tenemos mucha chamba por hacer

ndad donde vivo. Nuestra casa queda en el segundo piso, subo las escaleras casi corriendo y al abrir l

o miro de a

él se pon

arme un beso en la mejilla

ido este hombre? —le pregunto

me conduce a sentarme a un lado

este hombre sobre Eug

a verdadera. Ella baja la mirada y asiente lentamen

era joven trabajé en una casa como empleada doméstica, yo me enamoré perdidamente del hijo de los dueños, pero era un amor imposible, tu eres el fruto de ese amor, él siempre s

io hermano —musito

ombre que obse

a que te ha dejado a ti todo lo que poseía, se que él estará feliz de que recibas tu herencia —trago saliva. Veo al hombre —Eugenio y yo fundamos

o el

ánico no se nada de

aquín suelt

sea lo que tú esperas siempre existe la posibilidad de vender tus acciones, yo podría comprarlas ya que es patrimonio de mi famil

to. También pienso en mi abuela que ya es muy mayor. Mi mayor sueño es poder comprarles una casita donde vivir, sin preocupaciones d

le pregunto al recordar que cuando se presento

r Joaqu

o donde vivo y esta a dos horas de distancia en auto desde aquí —por e

a ver

s estaremos bien,

con el taller? ¿con Lucía? Yo tengo mi vida aquí

algo y se lo extiende a mi madre —¿cree que esto le alcance durante

ompleto. Tomo el cheque en mis manos. Treinta m

aba en las películas, pero ya veo que no, es real. Donde quiera