Chica Erótica
t
sus areolas me h
ra vista. Además del he
estado en una
3D grita diosa del se
escuchando desde en
la mujer es
a – respondo con si
stá muy
que estamos aquí"-
la que está aprove
ana. Debo decir q
Dejo de hablar cuando
r f
para ponérmelos y veo
Me río de su rea
én, mirando la
era vez que esc
! – Chasqueo los dedos
ual que la t
e - Y de paso me
los es u
ro buen desempeño e
ión de mi amigo y pasarme
l lugar, insis
Leon insistió en
lmente la casa. Com
de que no iba a poder
ro tampoco abusé d
empre recibe mucha
nte los sábados por la n
otro nombre y estab
rabajar en una ofcina,
novó por completo e
spués como Pa
la discoteca son los esc
por la zona, gratuitos para
ara que la gente baile ha
ervadas. No es un
eservarla, excepto
ieres más privacidad
, este es
es un DJ que prometi
000 y hasta ahora está
sación muy interesa
un vaso de whisky,
i l
uetear con mi
rte León señalándome
anteojos negros y ca
bios, Marcos. Es mi a
enta
, Leon -me burlo, poni
azó
o amable con los cl
a - dice Marcos,
a nada aquí, no es nece
amos – aplaude –
edido – dice, señ
ro del e
rección que señaló León,
ar a la parej
levo el vaso a la boc
a Marcos – le adviert
e lo de
e yo fui quien lo
del borde d
es decir que... – s
de nuevo – ¿Cu
iño hace apen
la noche, Leon me l
ción (tanto la antigu
asa. Hace una
un desacuerdo en uno
ar de desacuerdos sobre los pan
e el "niño" -hago l
años. ¿Será más fá
terminó su turn
jado cuando deje
scapar un suspiro, pas
derro
mi hombro y yo también
ridad está haciendo señ
ami
eñalando en mi dirección
as con mis
nada -digo
ndo la cabeza, dejá
y pido otro trago, pa
ido en una cola de
e hace mucho tiempo, por lo
nde
mientras pasa al
apoyándome contra e
oy muy orgulloso de León
ste l
ien yo ya sabía lo
a bastante perdido
Terminó tomando el
ue, como yo, siem
yo sabía que esa n
que había comprado
n su lugar, no dud
í había encont
ene en el otro extremo d
me llaman la atenci
omo mi vec
sus órdenes, está de espald
se para frente a
bar es un poco más l
personas entre nosotro
se ha fj
plateado que br
rdo nuestro rápido enc
os el hombro, pe
lleva a sospechar
na rubia, un poco m
ar. La rubia se incli
ta suelta una carcajada.
lta, pero veo s
ecina de decirle algo al
que necesita estirar un
intercambio de miradas caliente
a súcubo. La rubia
ás. Por la forma en que s
justo al lado de tu oí
s que a
o hacia otro lado y
lo último de mi bebid
e dirijo en busca d
sar la
la mañana cuando salg
Según recuerdo,
meterme la len
rme en silencio
. La sábana cubre la
o su espalda que
de el omóplato hasta
tá esparcido so
o cuando la escuc
ma
olo se cierra desde ad
e – informa ella, con voz
a dor
ja. Por su reacció
a maldiciendo ni siqui
raci
os en llegar al
vecina súcubo, recue