Volviendo a ti.

DES

mi

eoll

por favor

a tienes el boleto listo? ¿A qué hora llegará

o esto, sabes que falta poc

mos de eso cuan

semana, la hora de aterrizaj

opuerto?— preguntó, miro como su

rmano, Duncan me

pero venga a la casa. Quiero saber si

isa. —Tal vez podríamos hacer una carne asada en el jardín de l

no he hablado mucho con ella.— Unos toques en su oficina se escucharon. —Tengo que

adiós.— Se despidieron par

a tocar

ela

abierta por

est. -- Se adent

gunto al ver a su secreta

onistas llegaron antes lo están e

guna reunión o algún proyecto ahora?—

siguiente hora solo tiene que revisar unos doc

e, vayamos a la sala de reuniones, gu

-- Caminaron fue

ar

untó, dirigiéndose más a sí misma que al

a saber qué es lo que te sucede, aunq

ablando? No me suc

día ya no lees y te he escuchado llorar por las noches hasta altas h

do espiando?— Mu

a, en tu mirada puede ver que lo extrañas y no sabes c

ánimo no es por él, ¡

o entraré.— Se adentro a

illas frías y humo helado salida de su boca faltaban pocos días p

rsonas bailando, recordaba verlo acercándose a la barra con ese rostro tan serio e imponente a pesar de la poca luz que ilumina el lugar su rostro resaltaba, cuando escu

mable. -- Susurro. —Las cosa

los

ndo su abrigo y la suda

era inconsciente, pasó sus dedos por su muñeca izquierda, sintió la cicatriz de cuando intentó acabar con su vida. Recordó lo que

con eso pudiera deshacerse

ue había pasado en su pasado para que se volviera así.

ía a llorar. Lo sabía y no quería per

roja. -- Escucho

s y pudo ver

garrar un resfriado. -- En su v

s aún es temprano. -- S

la casa p

ón para levantarse y

se preocupe por mí.— Bromeó pasando

secuestrada estarías en un maldito sótano a

enes encerrada en esta casa así que es como s

la maldita voz

earas? Anda, hazlo. No se

ré daño, nunca lo haría!— Empezó a caminar de un lado a otro.

en esto. Deja de ha

asombrado y f

Acaso no recuerdas lo que te hizo? ¿C

aré así, no me quieres decir el por qué de tu venganza, ya no soporto más está situac

la miró

rastrado a todo esto peq

es. -- Dio unos

abe pronto y puedas salir.— Sacó las l

da, de nuevo estaba

ahora solo eran sollozos. No se había po

Pensó empezando a cam

tarde, no tenía mucho que hacer y despué

r yo, sin tener

E