Larry... Diario de una pasion

ítu

is

eca. –¡No! Es solo que nunca lo había visto, casi n

a tu tío Thomas, aunque no lo es, trabaja para él pero no es solo un empleado más, sino yo le llamo pupilo, ese sería el término para llamarlo. −Comento comenzando a beber su te−. No lo habías visto, puesto porque acaba de llegar no

de seguir con la tía, seguiría preguntando y lo que menos deseaba, es

n mi cabeza, cuando de repente encuentro una fotografía donde está él con mis tíos Thomas, A

en un lago pescando, obvio Larry es mucho mayor que mi tío Edward. Pero en esta foto La

nuevos brotes de las rosas que eran de mi madre, ahora que ambos iremos a estudiar

elos de Camila que estaba con John, sino un poco aliviada al no sentir más que un suspiro, al escucharlo hablar. S

a estudiar a Inglaterra. –Dije sin más, en esa época yo era muy arrogante igua

hn sacando un libro sobre botánica dejándome ahí solo viendo a través de la ventana, quién iba a decir qu

ra huérfana, adoptada por los Miller pero aun así huérfana. Al menos eso decía mi madre cada que tenía una plática, sobre la pobre chica que no le hacía ningún daño, solo ser acogi

lla solía referirse a la servidumbre, mi madre tenía en la cabeza que si no eras de

to es que él trabaja, ya sabía que se llama Larry, pero yo quiero saber más. No solo puedo llegar a preguntarle a la tía, no quiero meterlo en problemas si mis padres llegan a saber que tengo in

cuando entré quedé helada al verlo conversando con mi padre. Él me miró con sus ojos verdes, que hizo que la sangre me corriera como potro

e giró para mirar a mi padre,

í sentado, solo no podía emitir palabras, estaba estoica al sentir el aroma de su loción que penetraba mis fosas

olar mis nervios, pero que si me escaneaban en ese momento, t

bro que encontré, ya que; los nervios se apoderaron de mí, su

o que era mi aliado, le dije que me avisara cuando Larry venía a ver a mi padre, ya que, él también lo obligaban a estar en esas

a que lo veía mi corazón latía como si se me fuera a salir, pero fui d

además él ya es un hombre y tu aun eres una niña, sé que te has enamorado, pero no mi niña mejor mira

ta Larry, él un hombre como nunca había visto otro, sé que yo aún no soy una mujer, que me falta por crecer pero cada ve

unca, aparte de que aun eres una niña, el bueno siempre ha estado interesado en otra mujer, una que ya

y con un poco de dolor en mi corazón, al saber qu

udios, anda vamos ve hacer tus deberes. –Dijo con un poco de nostalgia, cuando me habló de ella. No voy a negar que sentí celos, de sab

ahí que en nuestra vida tenemos tres amores, el de adolescencia que es un amor infantil que te hace soñar, que te enseña a querer y te llena de ilusiones. El segundo el qu

y a punto de entrar al segundo amor, solo que será con el mismo hombre ¡Larry! Solo espero que si sea para mí y se

or. Estaba cortando flores, cuando lo vi llegar a mi casa muy puntual y seria como siempre, para hablar con papá. Solo llego, saludo entrando directo al estudio, sin percatarse de que yo estoy

que hizo que mi alma se me rompiera. Entre hasta el despacho sabía que estaban en su junta esa tarde, así que sin toc

a que nosotros no vamos a poder estar. –Dijo encendiendo su abanó, que fumaba siemp

dónde? –pregunte con los ojos llenándose de lágrimas ¡Ello

r su mirada hacia a mí−. Irás a un internado de señoritas donde concluirás tus estudios, tu hermano partirá un año después.−Dijo sin m

tando de no verme ansiosa al saber que me alejaría de m

lo en el futuro, pero ¡Tú mi nena! Eres diferente, tú solo concertaras un buen matrimonio, no te harás cargo de nada; al c

charlo ¿Qué? ¡Casarme! ¿Con quién? Si con el únic

me –espete muy segu

–espeto levantándose para ir hacia su licorera y servirse de su vino favorito, para beberlo de un solo trago. –¡No teng

sucedería. Todos los cercanos a la familia Macmillan o parte de su familia, tenían que estudiar en una de los más prestigiosos colegios de Londres, era una tradición familiar. ¡Vaya f

a su lado, pensaba ¿Por qué no me llevas lejos? El me miraba de cuando en cuando, mi rubor en mi cara no lo podía esconder, me encantaba sent

hay hombres como él, bajo mis maletas y las llevó a documentar, cuando escuche que llamaron par

años d

e olvidar a Larry. No saben el temor que tenía cada vez que venía de vacaciones, me topara con que Larry ya tuviera novia o peor estuviera casado, de hecho esperaba la noticia, pero cada que pod

, lo apabullaba con un montón de pregu

en la universidad de Boston, aunque…−dijo con una incógnita, atragantándose la las

siedad, quería saber todo de él, solo verl

sí que ya olvídate de él, deja de ver su instagram que ahí no sale nada. –Comiendo otro bocado de lasaña, bebiendo la soda que compraba para sacarle la sopa, sobre Lar

o? ¡Con lo guapo que está! Que solo los años le dieron interés a su persona, tengo que regresar, solo así podré estar cerca. –Leva

tener con él. –Dijo sirviéndose otra porción de lasaña−. Aparte que está el hecho de que él pudiera hacerte caso, te lle

esaré con la única intensión de estar cerca de él, si logro tener algo con él, créeme que lo tendré y no me import

ue a mí no se me da y no me interesa llevarlos. –Dijo bebiendo su soda−. Es la ún

tin

gusta y un comentario, si t

des so

edes so

k − Kar

am – Ka

− And