Mirada salvaje

aves del bolsillo trasero de su pantalón y me las entrego. —Fue un gusto

la culpa de que el

e hiciera? Que felicitara a la persona que averió el

do el camino. —aclaro. ¿En serio me estaba reclama

s quejas, Adiós

y no so

i como

no estaba mal. Me encontré con la sala, en esta descansaba un sillón grande en forma de L, al frente un televisor y junto a este residía varios libros apilados, pero… faltaba alg

sor. Me dispuce a revisar los libros para ver si encontraba algo interesante, pero lo único que encontré fue libro tras

ca era para reprobar el comportamiento de Logan y el mío, desde pequeño fue muy correcto y maduro, se podría decir que era una mini-version de su padre. No me sorprendio en lo más mínimo que haya deciddido seguir los pasos del tío Ben. Nuestras infancias fueron algo distintas, mientras Logan y yo pasábamos todas las tardes jugando, llenandonos

be ser Luke, se sorprenderá mucho de verme. Me escondí detrás del sofá para darle una gran sorpresa y porque no, un enorme susto, me acomode en el lugar

nstante. Ese tipo claramente no era Luke, ni se acerca h

ual tenía mucha lógica Tal vez la persona fren

qué me o

frente a mí con una enorme cara de sorp

mpresionantes ojos grises. El ladrón-violador se acercó muy lentamente a mi, como si temiera de que podría pas

permito. Mientras el se acerca un paso yo me alejo dos. Apreté el libro en mis manos, que por p

este libro en tu cara! —amenace tratando de hacer que mi l

ia lo llenará de Confucion. Dio otro paso, Al hacerlo cometió un grave error

me pegas? ¿qué

úpido porque se defenderme —exclame antes de volver a golpearlo con el li

arre en mi brazo. —Y ¿por qué me acusas de ladrón? —se

que eres un ladrón-violador

e…—no pudo terminar ya que mordí su b

a caníbal —gri

a. Cerré la puerta detrás de mi de lo que en efecto es la cocina y me dispuse a buscar

puerta lo

po de objeto que podría utilizar como arma, pero entre los cajones no ha

no encontré nada me adentre en el refrigerador. Cuando estaba co

o a que lo había golpeado con una jarra justo en su cabeza. É

e disponía a inclinarme para verificará si la persona tendida en el suel