PODEROSA ATRACCIÓN
nte fácil tener un empleo en donde haces lo
ante del socio, sin aviso previo y sin consultar s
lgo para e
do espléndida y tenia una nota , que Nestor quiso d
nde se encuentran t
ac
solo, esas miradas de estas dos mujeres que hacían que sus hormonas se activan. Gire la cabeza y lo vi, había e
oni
s
i, me había atragantado apenas Tomas sintió las braga
como una puta doncella tiene la ma
me sorprendí. ¿era casi
que gust
briel que gusto verte
raba mi yogurt el cual ya se encontraba completamente vacío pero sa
mi hermana.
e tenerla como secretaria asignada hasta
hacía todos. Quería irme al mismo demonio. Tire el vaso en la basura y sali pitando de la
ncuentran en otras empresas dado que ama asistir a eventos, fiestas y descontrol. Desde hace tiempo Victoria lleva suje
y vi a mi mejor amiga y cómplice Ganna B, qu
sto par
la cabeza y ella m
á la secretaría pero yo estoy de
entender por qué demonios esta
scul
que o
un id
jodido
sas que tenía en mi peque
rte de tu lugar de trabajo y dá
presa, la cual me hacía aún más "acomodada" en mi espacio de trabajo. No me relacionab
ala, tengo que caminar hasta
el gusto de s
usto a Gabriel de dejar mi lugar de trabajo para ponerme en un sucucho cerca de él
ntó tomando los ar
Kicklighter pero voy a estar en
l gran libro de notas del señor Gabriel Kicklighter. Su secretaria era muy específica en sus notas, en su trabajo.
as de Analie. nota "he pasado u
Leo Messi autografiada por su cumpleaños.
ba leyendo. ¿Tenía un hijo?. ¿acaso
entre
Se encontraba observando como si se hubiera dado cuen
s futuras, ¿acaso es s
encontraban en la mesa de mi pequeña ofici
a fam
s, ent
todas mis necesidades, es exacto como está anotado.
o me levanté,
xplico. Cumplo mis horas de trabajo y me voy a casa. No soy emplead
briel me irritaba, le par
recieron que usted se encuentra disponible y a gusto, en cuanto a lo demás, nece
n la jefa de la oficina, decir mis increíbles razones por las cuales se podía meter la empresa en el
er modificado, señor Kicklighter. No piens
la vez camino
minutos abajo, i
baño y me retoqué mi maquillaje, mi vestido seguía perfecto, claro que sí. El mismo valía miles d
a y me di cuenta que ya se encontraba dentro del auto. Camine rápidamente y en el mom
os, señorita Colema
ncó y me quedé allí, parada. Observé cómo se iba lentam
ta
ra apretar mi zapato hasta ver a donde llegaba. sabía que había odiado el momento en el cual hable