Una Soltera en Apuros
rancés y u
BR
dijo en voz baja Lina, porque notamos que al
é sin importar que me oyeran—. Tiene que ser una broma, Alis
s bromearía con algo tan importante —me vio a los ojos, dolida—. Creo que fue un error haber venido… me hubiera
rque esa era la típica manera en que nuestra pequeña p
a sabíamos que tenías novio —explicó paciente y ella solo se cruzó de brazos—. Te enviamos a Parí
mi corazón me decía que no debía
s ojos
irando los rosales secos de mi padre, como si fueran de lo más interesantes—. A lo que vinimos; cenaremos, lo conoceremos y luego tendremos una conversación bastante s
to corrió hacia donde estaba de pie mi
ue era rubio, bastante alto y con
s hermanas y a mi padre —dijo A
ancés? —replicó papá, extend
dre francesa. Es un placer conocerlo,
rmó serio con la cabeza—. Pues creo que se le olvidó menc
a —se presentó de la misma manera que mi padre—. Disculpa a mi padre y e
como lo ha tomado mi madre! —dijo nervioso
—saludé y él solo movió al
apetito a todos —masculló mi padre y no pude
acostúmbrate a esta familia para nada convencional y com
s detalles del curso que había tomado. Durante el postre, Lucio hab
y parecía un muchacho serio que como único pasatiempo, tenía la fotografía. Fue así
vios y mi padre siguieron al pequeño salón donde
susurré, mientras ponía en
tinta —dijo Lina y
amorada
Sabrina. Sabes que Alison es u
na ceja y ella suspiró, mien
s demasiado, porque mamá se fu
tidiarte —reí, bebiendo de
s lo único que
, por
ara que los empleados de la revista olv
. Mientras no quieras casarm
es algo
s decir? —fr
rías tomarte unas merecidas vacaciones y ayudarla —mencionó con suavidad y abrí la boca
ison despertará mañana cambiando de idea, ¡es Alison
as unas vacaciones temporales o unas vacaciones definitiva
ática —repliqu
otra salid
tiempo estam
desde que iniciaste… podría
mpo, ¿qué haré con tanto tiempo li
a revista, le duela a quien le duela. Sin embargo, estamos en la cuerda floja y por lo menos, démonos un respiro hasta que
minaré la semana par
as, Sa
gracias debería d
ver a los tórtolos —mencio
*
ingresando al salón y viendo a pap
engan, siénten
apá, quien tenía una copa de coñac
los novios con la mano que sostenía el puro y luego caló u
jo Lina, mirando con serieda
tante en Dubái, y debe marcharse en mes y me
los preparativos sin que se les escape nada, y no se sentirán tan ahogado
decir que amo profundamente a su hermana, desde el momento en que la vi —suspiró mientras la miraba con adoración y supe que no habría modo de hacerlos cambiar de idea—. Mis padres también se sorprendieron, pero saben que soy un hombre sensato que jam
Nosotros tampoco teníamos nada que refutar a sus p
i bendición para casarse, pero quiero que sepas, muchacho, que Alison tiene una familia
e prometo que dedicaré m
l tiempo que quieras. Después de todo, no harán nada que ya no hubieran hecho en París —bromeó p
s y pagar la habitación, pero a partir del día siguiente, t
la habitación de Lina, oyendo las mil y un anécdot
reparativos —dijo Lina y Alison se lanzó sobre mí, llenándome
y mi hermana mayor afirmó—. Tienes tu pasaporte al dí
qué tiene que ver c
y por supuesto vendrás conmigo —respondió, sin dar lug
ió eufórica la cabeza—. ¿
su familia en la boda. Será más fácil tras
edo salir del p
s al unísono y suspiré—. Tie
Recuerda lo que hablamos… —acotó Lina y
er una fiesta de despedida —dije
ilusión mi hermana—. Sé que en París nos ofrecerán una celebración, pero yo
ura. A Alison le costaría bastante adaptarse a
seas invitar
lina han sido como unas hermanas para mí. Me gustaría q
dijo Lina, con lágrimas en los
un esposo como la gente —volví a bromear, logrando que Alison y Lina me v
—susurró misteriosa
cas se te está
o que tengo el candidato ideal para ti —dij
, co
e sí, Sabrin
s haría un milagro si Sabrina sentara cabeza
que antes de marcharnos a París, debo despedirme de todos m
e invadió, porque ese pequeño diablo que tenía de hermana,
rrucaba en la cama que había extrañado ta
*
e pendientes resueltos. En la noche, Lina, papá y yo, ofreceríamos la cena que tanto d
nadaban en dinero, pero de la misma manera en que colmaron a su hija con cosas materiales, brillaron por su ausencia en los momentos importantes. Y Sara… Sara es un caso aparte y
ntrado el hombre indicado en su vida. Siempre hemos escogido al patán y nos he
or el trabajo a pesar de que se amaban profundamente. De pequeñas habíamos soñado con vivir los cuatro juntos,
i hermana no lo tome nada bien. Sin emb
sa también y solo faltaban
taste a Josh?
a de compromi
mbros—. Ese pequeño demonio… ¡me las
sotras, en especial para ella. Además —la miré de reojo—, lo de u
Y ayúdame a lleva
bien, e
chicheaba muy cómplice con mis amigas, y és
o y papá, bebieron algo fuerte mientras n
París… —inició Sar
como regresó Alison —entornó
er tanta sue
e soltera de nuestra pequeña hermana —mencionó Mila—. Pensar que le
tenido. Sé que no soy fácil y que a veces me he porta
a florecido —dijo L
mi hermano. Acaba de regresar a la ciudad y como Alison lo invit
—respondió Lina,
na en el aeropuerto para despedirlas —Sar
al comedor y Josh se despidió de Aliso
os decir—. Si tu agenda no está tan apr
es porque en el fondo sabíamos que ningu
estos para que reaccionara antes de que Josh se desencantara—. Si qu
mó el rostro de Josh,
comisura de su boca, mientras nosotras disfrutábamos internamente nuestra pequeña victoria—
stábamos felices por ellos y no descansaríamos hasta q
*
teza de mis amigas, hermana y mi padre, aunque sabíamos que en tres sem
s. Alison me había despertado y Lucio tuvo la amabilidad de llevar
más tranquila. No deseaba irrumpir en la casa de unos extraños y espantar a la familia política de Alison con mis tont
—pregunté cuando reco
te preocupes —dijo Lucio, mirand
rda idea de querer emparejarme con e
cuñado—. Piero es un caballero y
es casado? —pregunté y ambos me vieron divertidos
cio es un hombre bastante llamativo… las mujeres le llueve
fé, porque no me fiaba de
on siempre tenía intenciones ocu
ncitándonos a caminar hacia la
aba configurar mi móvil para poder util
lparme, topándome con unos ojos celestes y una sonri
inutos, hasta que Lucio carra
Brunelli, mi socio y m
s palabras convirtiéndolas en seda para mis oí
nombre con aquel acento, hab