No Me Dejes ir

a

é que le molesta no puedo evitar sonreír, quisiera disimular que no me estoy divirtiendo, pero estaría fingiend

cerle daño, me intriga saber si le da vergüenza verme es por e

ra y testaruda, estaría violando el código más importante del guardaespaldas jamás involucrarse co

eglas también van para mi sin excepciones, con lo justo que siempre he si

mi madre. Escojo unas pantuflas para que no esté descalza por la casa,

pantalón, entonces le lleva

le las cosas quizás desee cambiarse dentro, cuando estoy

ta de inmediato y mis alarmas se enciende, me retiro

arrón. Me relajo un poco, sonrió por su ocurrencia ella a

s bien te escucho

susto, lo siento- aquí vamos

vestido puesto, no es que quisiera verla sin él o en toallas, con el tiempo que du

brías duchado, algú

es de decir – no logro quitarme el

pucheros ya rec

ue te ayud

, me parece que no le gusta la idea de pedirme ayud

mpleto hijo de mie

jada – Ya veré cómo me lo quito – intenta c

para que se calme. Abre la puerta nuevamente le ofrezco

e mis dedos siento como una electricidad que llega a mi cuerpo, como suc

ar abrirlo- dice

arse, forcejeo un poco y s

amente hasta su cintura, me quedo un rato mirando su espalda desnuda. Borr

quien, contra estos músculo

o juguetón, sin enojo a

e retiro – digo co

incomodidad cierra la puerta y suelto el

ara es lo primero que veo, cuando se hace un ovillo en el medio de t

ro es plantad

narices, la primicia era lo primordial. Bufo al mirar su rostro enrojecido de tanto llo

oy un silbido. Ese vestido rojo le queda a la p

ron tengo en frente – eres hermosa princesa. Le digo, agacha la ca

sonrojada. Le hago se

e tema – lograste no mojarlo. Son

e es una muy bonita sonrisa. Se percata que la miro fija

ando una ceja – No me digas que veías porno. Suelto la carcajada sin poder creer que ell

– no queriendo borrar su sonrisa apag

o pensativo le sugiero - vamos a comprar algo de co

mándome princesa –

mundo, todo aquel que se te acerca es para conseguir un poco de fama y diner

o entiendo por qué no he dicho nada malo, se lev

uero de hambre. Voy tras de ella hac

tro enciendo el motor, quiero preguntarle que mierda sucedió como si adivinara mi intención enci