El club de los Inmortales
do que mi piel se erice y mi mente de un salto, el lugar está lleno de nuevos estudiantes yendo de aquí para allá pero yo no comparto su entusiasmo. Sacudo la cabeza intentando borrar los pensa
que, estoy segura que nunca has experimentado. Nicolas vuelve a reírse pero esta vez hay un tono amargo en su voz. -No estaría tan seguro de eso niña. -Dijo con un tono de superioridad en su voz. Nicolas se aleja caminando antes de que pudriera decir una palabra -Guau... que imbécil -dije internamente. La alarma de mi teléfono iniciándome que estoy llegando tarde. -Maldita sea, la orientación esta a punto de empezar. Salgo corriendo al edificio Durand, me apresuro y me siento en una de las sillas vacias. Aquí adentro la suntuosidad es insoportable. Varios representantes de la universidad dan discursos sobre la vida en el campus aunque soy incapaz de prestarles atención. No puedo dejar de pensar en mi encuentro con Nicolas de hace un rato, ese chico tiene una actitud insoportablemente arrogante. La orientación termina y no siento que me haya enterado de nada nuevo. ¿Todas las universidades tienen discursos inaugurales tan... sosos? ¡Estudien mucho y les irá bien! ¡No falten a clase! ¡Participen de las actividades extracurriculares! Como si alguien pagara tanto dinero para faltar a clase y no estudiar en todo el año. Siguiendo a la multitud y entro en lo que parece un salón de baile con una cortina de color bordo. Al menos este salón parece un poco más normal. Una persona sube a el escenario parece un profesor del Leonidas. -¡Muy bien, todo el mundo! Echen un buen vistazo a su alrededor, porque estos serán sus compañeros durante los próximos cuatro años -comenzó a dar vueltas en el escenario. -Recuerden que conocer a sus compañeros es algo muy importante. Incluso podrían hacerse amigos -agregó. Hago un gran esfuerzo por no poner los ojos en blanco y hecho un vistazo a la gente a mi alrededor. Una chica con un cabello rubio tan claro que parece blanco y unos ojos celeste cristalino, de alguna forma tiene un aspecto angelical. Se me acerca con una expresión de enojo en su rostro. -Hola, mi nombre es Victoria Abercromp. Una voz femenina me saca de mi trance. Una parte de mí quiere que seamos buenas amigas. -Soy Olive Wells, todavía no decido cuál carrera quiero seguir. ¿Tú estás igual...? -En realidad, estudio comunicación -responde con mucha seguridad. -Ahh, ya me parecía que tu nombre me sonaba -respondí. -Así es. Soy la más pequeña de tres hermanos. Dudo que llegue a heredar mucho más que el apellido -Victoria mueve los dedos y sus ojos se vuelven más fríos y calculadores -Ya que nos hemos presentado... Te vi esta mañana hablando con Nicolas. Suele ser un poco... distante, digamos. ¿Por qué te molestaste en acercarte a él? -Oh, es que se las ha arreglado para robarme el primer puesto en el examen de la beca. Estoy segura de que debe de haber sobornado a alguien -respondí. Victoria se lleva la mano al pecho ofendida. -¿Tú... qué? Perdona pero... ¿Eres tonta o qué? No se le dicen esas cosas a Nicolas Black.-dijo enfadada. -Lo siento, no entiendo a qué... Es un simple humano como