La Princesa y su Guardián
st
me golpea.
una mala partida. Alena significaba un mundo para mí. Era la pers
iento mal por tene
or qué tuve que engañar a Cam, de verdad creí que la amaba. Por un momento pensé que haríamos una familia, tendríamos un hogar, una casa grande, un
por Camelia tuvo un sentimiento tan diferente, que n
uviera diciendo. Es tan temerosa, tan delicada, tan frágil, pero a la vez es tan
ue me duele que no me
escalofríos, la miro a ella primero y luego me doy cu
l doctor se ríe fingidamente-. ¿Qué ot
mas para tratar los raspones y evitar dejarle cicatrices en su piel. Es necesario que ella deje sus deberes reales hasta
me entrega un papel con los medicame
rotegerla y no andar con los pensamientos en las nubes. Aterriza y has tu trabajo correctamen
a de la habitación el médico
más inalcanzable en esta tierra. Debí quedarme con los sentimientos d
... mis pensamientos los hace mi
n-. ¿Necesitas descansar? Puedo hablar con alguno
Voy a buscar los medicamentos para poder irnos. Jay estará afuera, por favor, cualquier cosa se
e sin
jarme sola. Mira que mal trabajo estás haciendo, Zervas -se levanta de la cama
lo que yo te diga -me mira con rabia, paso mis manos por el
blas así! -hace puño sus pequeñas manos-. ¡Yo fui la q
? -la miro con incredulidad-. Tú fuiste la que me echó ese
esaparece, Bastian Zer
sma manera, su respiración era rápida igual a la mía, la puerta e
recuerda tu posición ahora mismo -trago grueso y la ira termina p
er
al de aquí, Zervas! -este imbécil tam
en su voz len
n mirar a Alena-. Esto no se va a quedar a
a a quedar así, Ze
e puta
*
odiaba esta situación y lo poco compresible que se pone todo. Me sentía frustrado por mi trabajo y lo po
taba solo d
ana de no hacerlo. No tiene en cuenta lo que
rustra y e
pasillo VIP, estaba completamente vacío porque ordenaron evacuarlo al escuchar la discusión
y jodido por lo que sucedi
l otro molesto-. ¿Desde cuándo tú y Zervas se volvieron un
ales de la realeza -respondió Kyle-. Todo
de servicio con los chicos. Le ordené a Jay que s
da? Que jodido ingenuo -Daniels me ve-. ¿Por qué discutías con la princesa?
ido por ella y no precisamen
ede que tengamos choques laborales -res
e sucedía contigo y tus sentimientos con... desobediencia. Por eso lo suspendo y tú -niega con la cabeza-, Bastian, estás suspendido porque no controlas tu ira y estás estallando contra todos. Sé lo que le hiciste a tu comp
ntento hablar, p
a, tampoco tienes permitido ir. No tienes permitido verla bajo ningún tipo de circunstancia hasta que tu estés en tus 5 sentidos nuevamente -suspira-. Te lo dije ese día y te lo repetiré hoy nuevamente. Recuerda cuál es tu posición
lugar, Daniels y todos los dí
esde este momento hasta que la princesa Alena se recupere, qued
scucho los pasos de mi amigo, p
sti
aber que estoy lastimando a Cam, me tiene enfermo. Me enferma saber que Alena no me ve más que como un prostituto y no me ve como yo la veo a ella. Así que sí, estoy jodido, pero voy a solucionar todo y v
on todo lo
or un café -nos empezamos a reír-. Va
imbécil -
eron nada de suspensiones pagadas
ndonos y sal
a mi desastre con Alena, me seguiste apoyando