VOTOS MORTALES
pelo, como lo hago todas las mañanas.
en mi vida. Veintitres golpes de cada l
de Luca el día anterior. Lo toco li
noche y todavía no me ha dicho nada p
etrás de mí, mirándome con una expresión ilegi
sando o de lo que
la cocina. De alguna manera, recuerdo
veo a una gran cantidad de personas traba
y miran fijamente antes de incli
por mi cuenta," digo, espera
do haciendo. Paso lentamente alrededo
imera vez que veo a personas fuer
stuvieran aterrorizados, tratando de
oco mayor que yo se me ac
da, señora?"
el contacto
olo estaba
ía se nieg
ugar para que usted esté, se
poco desc
la cocina no es un
encia de Luca detrás de mí. Toda la c
n brazo posesivo alrededor de mi cin
a mi lugar", responde. Su piel está en
mi casa, como es la casa de mi esposa.
on eso... "Se ríe un poco y se aleja, p
ente sobre
or que no tengas ning
te serio mientras hace con
nte vigor
or. Lo
ra del brazo y me saca de la habitaci
e para h
menzado y ya estás c
risa en su rostro.
de ánimo ha mejorado, haciénd
ín y encuéntram
e sus labios, mi corazón cae en mi e
vida de un hombr
mente mi mejilla amoratada. Sus ojo
e, atrav
que te
ojos muy abiertos; me tie
y saco mi instrumento de su estuch
esada puerta, esperando ver a un ho
a sentado detrás de su escritorio con
s fren
en la habitación. Me hace señas para qu
al lugar, sintiéndome incómoda bajo
, finalmente
mi", dice s
dido, por decir lo me
ón?" Pregunto, un
riblemente la que escuché
ar la cabeza
están en su escritorio
luya de mis dedos. Por cuánto tiempo m
hacia arriba para ver a Luca sentado e
te
esas canciones la otra noche
una p
si todavía está de buen humor o si
a su altura intimidante mientras camina ha
." Su voz es inexpres
, no sé cómo
ando la puerta de su oficin
interviene. Se ve un desastre, si
el escritorio de Luca, y cuando ve que él no está allí, sus ojo
rabia florece detrá
ruza la ha
peraba que hiciera, se lanza directam
elo con un ruido sordo, gritando por la
Luca apartá
diablo
mente irrumpe en la ha
r con
escritorio, la molestia
iendo? le grita, pero ella todav
de la oficina. Este es claramente un as
por presentarse en nuest
Luca atraviesa la habitaci
asiado mi
star allí si él decide ju
me ama! ¡El es mio! ¡Siempre est
me grita todo tipo de obscenidades. Sinceram
curece cada segundo. La última vez que
Y la está vi
cortar
ando Luca la hace girar y la agarra por
adamente. El rostro de Luca está llen
zo. Digo
abra, parece que su agarre en
ro se hunde más en el escritorio. Me qu
matar a esta chica frente a mí. Sé que
stigaría por
te de la niña para que esté frente a m
niéndola inmóvil s
atura parada en la esqu
na puta. Ella
con matarla no m
rededor de su cuello y
a, levantando su cabeza y estrellándola
vimiento
r, te mataría. Entonces, ¿por qué te has
lada. Sus gemidos resuen
ar", susurra mientras las l
orazón se rompe
cabello, y él levanta su cuello en un
iempre ha sido mi hogar. Daba la cas
de vez e
hubiera preocupado por esta mujer. Y no creo que lo hay
da un vuelco de pavor. Me está metiend
mis fuerzas no
lis
sacándome de mis pensamientos y dud
erte agarre sobre la chica. Tiene los o
amente por
años y la mantuve cerca porque querí
a le era leal. Pero en el camino, pareció p
ndo. No sé por qué me dice estas c
jo sobre el escritorio y apoy
dorable, pura e inocente esposa para e
seguiré f
enuina, mostrando que le divier
ramente, deseo que eso sea lo que h
ndo todas mis
uenta todo esto. Me está haciendo sab
resión de mi rostro, porque
eso? Una vez que algo es mío, es solo
omo muy en se
e su rostro y mira a la
antera de su garganta y comienza a
luchar contra su agarre de a
o visual conmigo, como si me desafiara
para hablar, pero no pronuncio una p
la rubia y le estrella la cara contra el escr
la nariz. Hay una fuente de s
ado de mi cabello, obligándome a arr
abios y él me mira, silenciando rápid
do d
mí, pero no puedo ver nada porque me
ue nadie me tocara excepto mi esposa.
ntres en nuestra casa perturbando mi p
a pobre chica. Tira del martillo haci
asquido encaj
pronto como escucho el ruido, levanto
arma y provocando que dispare un tiro al techo. Jessica grita y sus ojos es
la bilis que am
e interferido. He interferido con lo q
pensar en las consecuencias, pero sé q
ran, no habría podido
un dolor cegador se dispara a un lado de mi
ercándose a Jessica. Lo miro con visi
el c
n hombre entra en la hab
alguna vez vuelve a mostrar su rostro
astra a Jessica fue
migo; camina hacia mí y se sienta a h
etada en la mis
s salen temblorosas y desesperadas, p
manos alrededor de
veces debo decirte