Corazón de Espinas
amos en llegar al grotesco bar en el que Tori, la amiga secre
l vecindario en sà es algo menos transitado, pero este lugar, en donde el olor a drogas sofoca y los gritos de los hombr
horas? -Logan tiene los ojos abiertos de s
el esfuerzo al ella dejar su peso en las patas traseras para mecerse-. Que tú me hayas
Logan diga algo más-, aún no caemos en
steniendo su nuevo documento de identidad que e
-sigo comparando el de Tori con el mÃo, e incl
y Logan le tira con una papit
ar de nuevo a nuestro infierno. La sonrisa se borra de mi rostro, y guardo el nuevo documento para no seguir viendo un nuevo fracaso. Si bien no
sin poder evitarlo. Ella reacciona que me dolió y me observa acusadoramente, ya que no le habÃa contado so
van en los mÃos con reproche. La conozco, en su mente tendremos un final feliz, se niega a ver que la realidad es cruda, qu
coche, tenemos l
soma la decepción de su plan fallido, pero es la realidad, es nuestra r
pidiendo hablar, captando nuestra compl
a cara de mi amiga es cómico, más porque en realidad era ella la que siempre quiso que él le pre
yo sepa tie
abeza divertido por la amplia sonrisa
ta caminando hacia el pequeño patio tra
mo haremos para sobrevivir solas? Al menos aquà tenemos el dinero de nuestros padres, un techo y comida en la mesa cada d
ejas arqueadas denotan que algo le preocupa. Intento sonreÃ
mocionada con esta loca idea, pero el miedo se apoderó de mà desde el minuto uno y no puedo apartarlo
llo que pude robarle a Logan, junto con su encendedor. Lo llevo a mis labios y automáticamente el sabor actúa sobre mis nervios como si fuese anestesia. Mi mente comienza a divagar entre lo ocurrido estos últimos dÃas, y el agujero en mi pecho
o todo era momentos felices. Aunque, ¿a quién quiero engañar? Nunca estuvimos realmente felices, nos conocimos y dimos lo poco que tenÃamos de bueno, nos ofrecimos al otro y nos terminamos consum
y prolongada calada al cigarrillo antes de arro
ane. Atrás de ella vienen Tori y Logan, y por su sonri
pero antes de que sus brazos me rodeen
teo mi mochila, que Lo
po y mi espacio cuando estoy mal. La charla de hoy temprano cruz
Derek. Y tampoco nos despediremos. ¿Qué hará cuando se entere? ¿Irá a buscarme? ¿Acaso le preocuparé? Claro que sÃ, soy la única amiga que tuvo en tanto tiempo, la única que realmente l
yo, para no