De la traición al éxito: El ascenso de una heredera oculta
s de Stella. Sus ojos se abrieron con incredulidad, y toda esa arroganc
lado, soltaron una carcajad
en que tienes que recurrir a un truco como este? Hay
uién te crees para h
su tiempo. ¡Deberías est
zó a pedir su comida, como si ninguno de ellos existiera. Cuando terminó,
dijo: "¿Piensas quedarte ahí parado todo el día?
habían hecho acelerar el pulso. La historia que él le había vendido -la de un hombre humilde y trabajador- era
resultaba imposible recordar qué le había atraído de él en un principio. C
en. Su mandíbula se tensó mientras
sí sea", espetó. "Pero no vuelvas
s amigos saltaro
alquier mujer que quisiera. ¡La gente
á más cartas de amor de
e antes de que él siq
por qué eres tan difícil? Solo di que lo sientes y todo se
os ojos de Stella mientr
nas flaquearon, haciéndola caer al suelo. El sonido de su caída resonó por todo el
lla y la abrazó con fuerza, proteg
ignación recor
ser tan fría? ¡Pídele perd
margada porque Jenna
Jenna, nunca te puse un dedo encima. ¿Qué
que hiciste! Si no te hubieras movido así a propósito, ella seguirí
ta. "Debe seguir enojada porque la acusé de robar mis resultados de investigación",
¿Otra oportunidad? Me rogará perdón antes de
por complacerlo, esperando que nunca se fuera de verdad. Por e
na orden: "¡Stella! ¡Levántate y tráe
tella apenas levantó la vista. Tomó los cubiertos y sus l
me y distante. "Si Jenna necesita primeros auxilio
gos de Owen desataron un torrente de gritos,
ana? ¡Eres completa
uí, con dolor, ¿y tú te quedas se
colgarte de cada palabra de Owen y ahor
jer basura de siempre, sin
padeó. Owen apretó la mandíbula hasta que pareció dol
ervino, con dos guardias de seguridad a su lado. "No tan rápido", dij
e, con furia en los ojo
nquilo y casi divertido. "Llama a quien quieras. Yo no
uró: "Mejor dejémoslo... Quizás esté sin blanca
sto no es nada para ti. Tu famili
paso a una humillación silenciosa mientras
uavemente, con los ojos llenándose de lág
on sobre Owen, mientras se quedaba inmóvil
a mesa y, por fin, lo miró de frente. Su tono era frío y burlón. "¿Qué