¿Despiadada? Solo con los que la defraudaron
daño. Su voz bajó, de forma grave y venenosa. "¿Divorciarnos? ¿Crees que
ero su mirada nunca vaciló. "Ethan", consiguió decir, cada palabra temblando d
gado de implicaciones. "No. Mi abuela siempre ha querido un nieto. Cuando el niño nazca, será
uebró, ahogada por la angustia. "Ethan, eres un hombre despreciable. ¿
re. Ethan no le dedicó ni una mirada. Sacó su teléfono, contestó y su
illa retorcida en el pecho de Hannah.
a sentir el sabor de la sangre en la boca, reprimiendo
ía e implacable, se posó sobre ella. "Hannah, el divorcio no es algo qu
uelta, se alejó, dejando a Hannah en
a pared con amargas lágrima
e Ethan no te
cer pasar al bebé de otra mujer bajo su nombre, obligándola a aceptar la hu
otear su dignid
do y empezó a meter sus pertenencias a toda prisa en una maleta. E
el hogar en el que un
venta metros cuadrados que era suyo. Sin embargo, cada centímetro es
n sobre una fotografía que había sobre la consola y, por u
nte de calidez, la miraba con ojos tan suaves
uando su padre biológico muri
ar con un miembro de la poderosa familia
de un alto estatus en Aprubburgo, Hannah no era más qu
guantando sutiles indirectas y crueldad
siempre la había apoyado, alejando a
a la única persona que la trat
a renal y requería un trasplante. Toda la familia se había someti
lo dos veces, aceptó don
ser dado de alta al día siguiente, y la idea le reconfortó
.
e levantó y vio su pálid
agotamiento que había debajo. Rhett no necesitaba verla así; si se daba cuent
lista, se fu
bitación de Rhett, el sonido de u
itivamente me casaré contigo. Anunciar
e detuvo
a sala estaba
nado. No había ni rastro de enfermedad en su postura ni en su expresión; parecía sereno, intacto. En sus brazos, Silvia Cl
edó mirando,
defenderla, jurando que nunca se casaría y que siempre la protegería? Él le
en su corazón momentos ante
llas. Sabía que debía marcharse para evitarse más humil
a se abrió con un cr
secó las lágrimas, con la esperanza de
os de Rhett brillaron con
emblaba, pero él la interrumpió an
estuve gravemente enfermo, ella me donó su riñ
zo de Rhett, su voz cruda y desesperada. "No, Rhett