La vecina olvidada
había hech
Maverick asumir l
No me disculparé. Él fue quien chocó conmigo primero, me in
de repente soltó un
mulada que en todos los demás: "Beatrixa,
xcusa, enfureciste y empujaste a alguien, haciendo
resonó en s
acía un año, cuando quiso perder peso, pasó tres días enteros sin c
inalmente, con los ojos enrojecidos, la abrazó y dijo: "Bea, a mis ojos, no estás gorda, eres ado
ck decía que su go
ho, que la humillaran
rió tambaleá
a podía ver que su estado de áni
, era el cumplea
iesta de cumpleaños e invitó especialment
entre las dos familias, los padr
da la familia apareció en
incón, evitando deliberadame
o de cortar el pastel, ocur
evisor aparecieron fotos de Beatri
eatrixa estaban sonrojadas, con
la foto solo mostraba media cabeza si
rando a Beatrixa en actitud
o tiene vergüenza alg
acuesta con hombres
tos, el rostro de Beatrixa se v
que Maverick le sonreía y dijo lenta y silenciosame
revueltos, todos mir
on que la protagonista d
fotos, sufrió una crisis de hipertensión ar
amá
. "Bea, ve a casa primero, yo acompañaré a mamá al ho
hablara, su padre se volv
, mirando cómo la am
rás de ella y, sin mediar palabra
ue Maverick la llevara a un lugar desierto, Beatrixa liberó
te arrepentirías. Esta es mi primera advertencia para ti. Algo que podrías hab
Maverick frente a ella era tan extraño
e antes mostraba parecían
sa, preguntó: "Si acepto estar contigo, ¿d
a oído un chiste muy gracioso,
ra que estoy con una chica de setenta kilos, ¿sabes cuánta gente se burlaría de mí? Me gustas, pero me gusta más Bailee
una mano grande lo apretara con fuerza
e, pero por costumbre
lmente cedió. "Está bien, acep
a que se fuera al extr
unca volvería a
eró en casa
lmente regresar
menzaron a pregunta
onfesó que antes había estado con Maverick.
"Pobrecita, has sufrido. Cuando nos vayamos al extranjero, todos los que te hiciero