Ecos de un voto roto

que su esposo, Joshua Hayes, desde hacía cinco años planeaba entregar el hígado que le

ompió el coraz

, pero ella decidió recuperar

ado en cinco años. "Voy a Jaxperton pa

e fue, Joshua se desm

.

e hígado, Kathleen finalmente

le ajustó la manta con cuidado y sali

ese día, la mujer sintió un impulso repentino. Agarró el auricular Blueto

l hígado que le donaron a Kathleen a

a su madre. Después de todo, me

solo tres meses sin el tra

uede esperar. Otro l

us oídos retumbaban, su mente se paralizó, y una

o largo de tres años, las incontables estancias en e

lo que él recorría la ciudad hasta seis vec

a de los quirófanos, rezando con profunda devoción. Incluso dedicó

bre tan entregado

de sus pensamientos. Se con

o su enfermedad empeoró, él nunca habló de ren

nueva llamada. "¿Hola? Cariño, hoy es el cumpleaños de nues

thleen se desm

o", respondió Jos

e que vimos en el centro comerc

, querida. Espérame

mientras Kathleen se

speranza, pero ahora su cuerpo se sentía

quedarse solo por la muerte de sus padres. Kathleen se enamo

hasta el matrimonio. Joshua la trataba como a una r

ció a su lado, sin quejarse a

, llorando, rogándole que resistiera y no lo aband

uz tras la penumbra, sin sospechar q

eguntó Joshua mientras

por la cirugía? No te preocupes. Acabo de hablar con Brennen. U

ariñoso como siempre. Si no lo hubiera escuchado, tal

der algo urgente en el trabajo.

u brazo. Nunca dudó de él antes,

un vaso de leche?",

ación. Las manos de Kathleen temblaron mientras desbloqueaba su ce

llamada con "Gerente Brown" hace dos minuto

us mentiras eran tan torpes

a antes de beber. Tengo algo urgente, así que me voy ahora"

ó. Él no podía e

és, ella abrió el

i se había olvidado de que él había instalado

parecía una

ar al ver la ubicación. Su auto

cidente automovilísti

con cáncer. Casi se rindió, pero la prese

un nuevo apartamento. No había regresado a la c

la villa. Cuando se cargaron las

res ya no estaban. En su lugar, una mu

cinco años, corrió hacia los brazos de Joshua al entra

nsé que te perderías el cumpleaños

ronto como pude. No te pongas triste. Mira lo

de muñecas Barbie y le dio a

ante: un collar de edición li

leaños en tres días. Pero ahora, lo colo

e habían desgarrado el coraz

s no para evitarle el dolor, sin

o pudo. Abrió imágenes más antiguas, sofoca

á donde ella una vez se tumbó; en la cocina de su madre; en la m

n la pared, burlándose de ella mient

en risas amargas. Las imágenes sórdidas g

en, cambié de opinión. Voy a Jaxperton

vación era una cruel trampa. Si ya no era amada, n