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El Novio Indeseado

El Novio Indeseado

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Capítulo 1 El acuerdo del abuelo

Palabras:1961    |    Actualizado en: 03/08/2025

suavemente con cada paso, perfectamente sincronizado con sus tacones de diseñador. Recién llegada de París, donde había asistido a una gala bené

la en el despacho como si se tr

a copa de brandy en su mano derecha, y una expresión tan seria que

tranquila que solo los hombres que han hecho

sabe que nada bueno viene detrás de ese gesto solemne. Se sentó cruzando las piernas con impecable

lado tu c

etuvo por un

stas hablan

se momento llegaría, pero jamá

igo mío. Se llama Gabriel Devereux. La boda

cabara de decirle que ib

puedes decidir por mí como si

ca. Es un hombre con poder, influencia y una fortuna que rivaliza con la nuestra. La fusión de n

pasó con eso? No quiero

ca, de esas que vienen acompañadas

ños. Pero cumplirás con tu deber. Así como lo hice yo, así como lo hizo tu padre ant

abía sido educada para resistir, para mantener la postura,

el negocio familiar. Su abuelo no lo decía, pero estaba claro: o cumplía o sería exiliada simbólicamente. Como una reina caída en desgracia. Esa

apretaba los puños-. Me casaré. Pero el día en que

ho, como quien acaba de ce

rrecta. Eres sensata Helena. La pe

🌹

afetería en el centro de Londres

no hacían ruido al caminar y un peinado recogido que parecía sacado de un anuncio de perfume francés. Cada ce

spe

spe

s tarde -sí, los c

el De

abello rebelde como si hubiera salido de una motocicleta y una chaque

elajada que lo hacía parecer encantador y arrogante al mismo tiempo. Parecía el tipo de hombre que se toma un whisky

gafas de sol hasta después de sentarse frente

replicó ella, sin levantar la voz, pero con una mi

se como si estuviera en su sofá vien

estir y... ¿qué clase de millo

mbros y levantó la mano

onarte, princesa. Yo tampoco pedí este compromiso. Mi padre firmó el acuerdo mi

.. ¿por qu

gelar mis cuentas si no aparecía.

padeó. ¿Er

la, sonriendo con una mezcl

fine. Yo no haré escándalos. Pero tampoco fingiré ser el príncipe encantador que esperas. No soy refinado, no soy

caos andante. Un guapo, magnético, insoportable caos que no se tomaba en se

ó y murmuró p

Cinco años.

o interés. Al parecer no er

mantra o u

n la delicadeza de una rei

mb

🌹

eco de sus tacones contra el mármol blanco retumbaba como un metrónomo de impaciencia. Se había quitado el abrigo de cachemira y lo había de

n una voz cantarina que contrastaba con el ceño fruncido de s

enso, y clavó en su hermana menor una

Si lo hubieras visto... no le importa nuestro compromi

rado al café, con el cuello de la camisa abierto, el cabello desordenado, esa chaqueta de

je de incredulidad-. Su ropa, su cabello

a con ese aire travieso de quien observa el mundo com

rte enojar. Y eso, herm

en el pecho. Llevó sus manos al regazo, acariciando distraídamente los pliegue

in amor... -susurró, más para

quien observa un cuadro en exposición y encue

a por compromiso, no por amor. Es lo que mamá s

fuera, el viento agitaba las cortinas de lino, recordándoles que el mundo

voz baja pero firme-. Solo espero que este

n ternura. A diferencia de Helena, que siempre parecía una estatua de mármol inquebranta

s opuestos se atraen. Y tú eres perf

ó una carca

hombre es un huracán, y yo... yo

pejismo indeseado: su sonrisa descarada, la forma en que había apoyado el codo sobre la mesa como s

escondido entre la rabia-. Pero no me queda otra opción. Debo soportar

egamente. Helena podía aparentar calma, pero era fuego contenido. Y si Gabriel era realmente un huracán,

apretó

las historias que menos esperamos son

encia, desde esa parte ingenua que aún creía en finales felices. Ella, en cambio

cabello frente al espejo. La perfección, pensó, era su armadura. Nad

con voz firme, casi sole

melancólica. En el fondo, ambas sabían que

🌹

a, Gabriel se dejaba caer sobre el sillón, riendo solo al recordar la exp

, miró el techo y m

sa... veremos quién

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1 Capítulo 1 El acuerdo del abuelo2 Capítulo 2 El anuncio, ¡Y el anillo!3 Capítulo 3 El diamante invisible y la furia elegante4 Capítulo 4 La joya del escándalo5 Capítulo 5 Una boda digna de una Windsor6 Capítulo 6 El silencio que grita7 Capítulo 7 Una cena romántica8 Capítulo 8 Fruto prohibido9 Capítulo 9 Fantasmas en la mesa10 Capítulo 10 El regreso de Sandra Alemán11 Capítulo 11 Sombras del pasado12 Capítulo 12 Veneno en la piel13 Capítulo 13 El silencio que quema14 Capítulo 14 Mas fría que el mismo infierno15 Capítulo 15 El infierno al desnudo16 Capítulo 16 Juego mortal17 Capítulo 17 Una promesa inocente18 Capítulo 18 La caida del cisne19 Capítulo 19 El orgullo de una reina20 Capítulo 20 La fría guerra21 Capítulo 21 Una tormenta en silencio22 Capítulo 22 Negaciónes inutiles23 Capítulo 23 Provócame24 Capítulo 24 Juego de caballeros25 Capítulo 25 Cadenas de seda26 Capítulo 26 La serpiente bajo la seda27 Capítulo 27 El paraíso puede arder28 Capítulo 28 La suite de los demonios29 Capítulo 29 Cena para tres30 Capítulo 30 Una mentira bien dicha31 Capítulo 31 No somos nada... ¿O sí 32 Capítulo 32 Moscas en la miel33 Capítulo 33 Esposa ausente34 Capítulo 34 El lugar vacío en la cama35 Capítulo 35 Donde se esconde el silencio36 Capítulo 36 Amigos y secretos37 Capítulo 37 Una tarde de café38 Capítulo 38 Un accidente o algo más39 Capítulo 39 En el hospital40 Capítulo 40 Advertencia41 Capítulo 41 El secuestro42 Capítulo 42 Mi lugar es junto a ti43 Capítulo 43 Algo cambio44 Capítulo 44 Viejas deudas45 Capítulo 45 Sentimientos46 Capítulo 46 Amor en el aire47 Capítulo 47 Cada quien en su lugar48 Capítulo 48 Envidia49 Capítulo 49 Peligroso como las serpientes50 Capítulo 50 La calma después de la tormenta51 Capítulo 51 Velada romántica52 Capítulo 52 Piezas en movimiento53 Capítulo 53 Movimientos oscuros54 Capítulo 54 Resolviendo problemas55 Capítulo 55 Rostros falsos56 Capítulo 56 Ver el mundo arder57 Capítulo 57 Roses familiares58 Capítulo 58 Un refugio59 Capítulo 59 Gato casero60 Capítulo 60 Verdades y mentiras61 Capítulo 61 Al descubierto62 Capítulo 62 Sospechas peligrosas63 Capítulo 63 Atentado64 Capítulo 64 Tranquilidad escalofriante65 Capítulo 65 Una decisión estúpida66 Capítulo 66 Humillación67 Capítulo 67 Disculpas falsas68 Capítulo 68 Un pequeño accidente69 Capítulo 69 Noticia devastadora70 Capítulo 70 Verdaderos colores