La Sombra de los Castillo
i a Máximo Castillo,
esta de boda
dellín, un hombre al que a partir de e
gro que yo no entendía. Los hombres con pistolas en
o con fuerza. Su vestido de seda br
tu nuevo papá. Y a tu
a fría, u
mirada que congelaba, apenas me vi
e un hombre viejo y cruel. Me analizó de arrib
capo y susurré un "p
ra darme la vuelta
ental. El agua helada me entró po
rar, lo vi de pie en el bo
es que eres par
avergonzar" a la familia, mi
barrotes de la pequeña ventana,
urmuró. "Dice que es c
ridad, con el sabor a humil
rimer día en