Mi Corazón Renacido en los Olivares
el magnate del aceite de oliva, Don Alejandro
ía su carrera de torero
vaciló ni un segundo para enviarme,
upliqué, le recordé al hijo
miraba con frí
gar, y al volver, se quitó la vida, un inform
una rabia oculta, espe
ató a nuestro recién nacido, culpándome de la muerte de Catalina
o? ¿Por qué tanto
n los recuerdos de esa vida grab
municó la noticia, en lugar
vez, les daría exactamente