Cambio al Padre para tí HIjo Mío
mbó en la oficina
nada por su primer día de escuela, pero el
registrado en Madrid, un tal Mateo, y según la ley, Le
ía declarado su exmujer y vivía con otra, El
pasillo, lanzada por las miradas de
nuestro hijo, pero su voz fría solo ofre
uego, el pánico: apenas me bajé cinco mi
del autobús fue lo último que vi an
por la "paz de Elena" mie
jé al Guadalquivir desde el Puente de Triana, pidie
io me golpearon al mismo tiempo: estaba de vuelta
utobús a Madrid; esta vez, la guerra empezaba,