No Soy Tu Tonta Enamorada
rtido con Javier. Necesitaba recoger mis cosas, borrar cualq
a, un olor a comida
a preparar nada porque "sus manos eran para diseñar, no para ensu
or, envuelta en una de mis batas de seda
se transformó. Pasó de la so
es aquí?"
tamente hacia nuestra habitación. Mateo me siguió,
ra! ¡Tenemos
puerta del dormitor
había desaparecido del tocador y las mesillas. En su lugar, había r
i existencia en
as?", pregunté, mi vo
"Están en el trastero. Isabella necesitaba e
pareció en el umbral, afer
oz melosa. "No quería causarte problema
, le dijo Javier, lanzándome una mirada de r
de la escena e
mis cosa
Javier. "¿No ves que está delicada?
a" salió de sus la
débilmente. "Javier, me s
fuera de sí. Agarró la copa de vino tinto que había sobr
udo y cegador. Sentí el vino frío y pegajoso correr por
erpuso entre Javier y yo, empujándo
do la cabez
una furia irracional. Me agarró del bra
lo has b
la cocina y cerró
pares esa sopa a Isabella! ¡A ver si
e girando en la cerradura, la sangre goteando en el suel