Aprendiendo a ser Luna
Busco ser lo más natural posible. A pesar de mi espíritu de alfa, pensaba en mí más como una omega q
ue el temperamento de nuestros lobos complementa nuestra personalidad humana y en nosotras esa regla persiste. Su llamativo color resalta con el negro pro
poner a prueba los límites de mi padre si ella quiere que mantengamos nuestra postura. Es una loba alfa en todo el esplendor de la palabra. Creo que papá, muchas veces cede porque que en el
anonimato. Su nombre sólo es reconocido en el mundo humano por su seudónimo. Esta discreción ha permitido que haya establecido una gran industria de confección en nuestra manada, fabricando toda clase de prendas con un gusto tan exquisito. El desarrollo de este imperio ha favorecido a otras manadas, siendo la razón que esas pequeñas manada
dama sin ocupaciones como muchos podrían pensar. Aunque, para mi madre, su mayor obsesión es atiborrar mi guardarropa con prendas de moda de la temporada, muchas de las cuales no logro usar cuando hay otras más nuevas. No soy de usar maquillaje ni ropa llamativa. Unos
der sobre ello y aún más cuando debo poner en práctica; moriré guardando ese secreto, ya que siempre pretendo actuar como si nada de ello será parte de mi vida cotidiana. En
en el instituto. Mi madre se siente mal ya que será el primer cumpleaños de uno de sus hijos que no cele
a organizan una fabulosa y muy suntuosa cena familiar, obligándonos a vestir formal. Sólo seríamos mis padres, la abuela; mis hermanos y sus parejas, ya que ninguno tiene h
de arreglarme, según mi madre. Mis cuñadas siempre alaban mi figura, eso me causa un poco de timidez. Ellas son las que parecen perfectas modelos de revista y siempre se ven tan presentables para mis
o inicio para ti ". Mi réplica no se hace esperar: "¡Oh vamos papá! ¡No me atormentes! Ahora deberé angustiarme toda la noche pensando qué tipo de monstruo será m