Un Heredero para el Alfa.

r Omnip

er ahí. Deja de jugar conmigo y responde -g

*

ecomendaciones, aunque hay una que lo tiene inquieto, cosas que no le cuadran

firmado que Annie

evitar que Raiza y Reina se enfrenten con su madre, ya que ellas quieren arranca

dicaciones del médico para preparar su vientre para el futuro embarazo

nio que se lo llev

a dejado de hablarle. Para colmo de males, su celo se ha

ca para que sea sus ojos mient

, sin importar su especie; sabe que se la coger

dad, en lo alto de la m

ácil acceso. Pero como sabe que las hormonas de Thor están dispa

de alto calibre y densidad, junto con puertas y ventanas de seguridad, y cer

sesperación que le provoca el celo, no dudará en manipular la mente de cualquier lobo p

diente de esta puerta y, por ningún motivo, me permi

endo,

igo. Conozco la fuerza descomunal de Thor

ento -le recrimina su lobo

te romperme la

o. Siento que mis pelotas se

co -le responde el A

lor infernal y sé que este será el peor de nuestros c

é haríamos con veinte lobas desqu

solo mi Luna designada podrá llevarlos en su vientre. No haré la estupidez de tu padre

o a estar con alguna loba. Pero nuestra época está pasa

icionar a mi Luna -

déjame terminar de darle

asi

mi madre sepa dónde estoy. Conozco sus alcances y sé que pu

velaré su ubicación. Le dejar

trechando su mano con e

l calor de su cuerpo lo devora y le nubla la mente. Su part

-

sacar de su mente aquellos bello

s, sus bragas se humedecen. No sabe por qué sient

que está tomando para poder embara

-

n su tercer

meterse en la tina llena de hielo y ni así logró controlar el calor

desesperación,

! ¡Sácame de aquí o te voy a quebrar la cabeza

cree que hace el efecto contrario. A los cinco minutos, nu

vamos a sobrevivir -gruñ

más, como eres un idiota

s de es

no res

. ¡Esto es demasiado para ella, entiende! -gruñe

rpo contra las paredes

r era el que se resistía a estar con una mujer. No entiend

go en cada fibra de su cuerpo amenaza con ve

eseo. Siente que entra en un sueño profundo, donde una voz dulc

eció ver un li