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No mires atrás

Capítulo 4 Y no eran los primeros que rompían a una como yo

Palabras:1376    |    Actualizado en: 02/04/2025

rados. Y lo único que se me ocurrió fue meterme debajo d

radura - dijo

a llave -resp

ue la chica era salvaje

l otro, y sentí cómo se me cortaba la respiración

-murmuró Lana, apartándose de mí como si el horror la

iéndome moverme. Los hombres entraron en la casa, y sus linternas rasgaban la oscuridad, como cuchillos abriendo cada rincón de

o de ellos pronunció

escondió - siseó el otro, esc

debajo de la cama hubiera suficiente luz. Se apoyó levemente en lo

ugar donde esconderse: debajo de la cama. Justo ahí

sintiendo cómo una descarga dolorosa recorría mi cuerpo, retorciendo mis en

l hombre mostró una mueca que

anos me agarraron por los hombros y me tiraron bruscamente. Grité, y cuando intentaron taparme

él con tal fuerza que casi

ue te gusta

.. Suél

ahora empezaba a hervir de verdad-. ¿De verdad crees

tada y me lancé hacia la puerta. ¡Pero nada de eso! Me agarró del cabello y me tiró haci

rrancó bruscamente los pantalones y me subió la camiseta.

mo si me arrastraran de nuevo a aquel día, cuando ya había pasado por algo parecido. Cuatro bastardos me atr

todo lo que tenía. Perdí no solo a mí misma y mi vida, sino también a una persona muy

crimen. Y ahora todo se repite. Me vuelven a manosear, me d

inmediato que los dos tenían una erección bastante considerabl

podría soportarlo, que solo tenía que aguantar. Tenía que m

s-. Pero, ¿para qué deshacerse de bellezas tan jugosas? No vas a mo

la chica quién manda aquí

unta, sonrió con picardía. Agarrándome del musl

ea - respondió

s y empezó a bajarlas lentamente.

or... no

pondió el hombre con sorna-. Vamos, Amir,

usta... Mira qué fresca está la chica, aún podemos sac

s, seré delicado

manos, me las inmovilizó contra el suelo por las muñecas

ité, intentando morder de n

saco los dientes. - dijo V

jando al descubierto mis na

over las caderas de un lado a otro y

ozó con los dedos mi pubis, y luego se metió bruscamente entre m

mojado - informó con rabia.

nena le va lo rudo, y tú la est

va lo rudo? -

hacía tanto que no tenía sexo... Ni una sola vez desde la violación. No tomo en cuenta lo que pasó con Lázarev. Me violó toda la noche por el ano. Y ahora, este desgraciado mete sus dedos en m

as... - se me esc

iquiera er

negué con

imos y llevó la mano libre a la hebilla de su cin

Kuzka" - dijo Vahid co

respon

Kuzka"! - grité asustada. -

r duramente o asustar a alguien seriamente. Se usa para decir que alguien va a "darle una lección"

vas a ver lo que es bueno!" o

? - comentó Amir, bajándose los

cabello y comenzó a rozarse contra mí. Entró en mí lentamente,

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1 Capítulo 1 Algún espantapájaros pelirrojo2 Capítulo 2 Los colores del cielo empiezan a desvanecerse3 Capítulo 3 La luz apenas penetraba en el interior4 Capítulo 4 Y no eran los primeros que rompían a una como yo5 Capítulo 5 Era una pesadilla silenciosa6 Capítulo 6 Tortura con agua7 Capítulo 7 Mientras no hayan vuelto8 Capítulo 8 Todo estaba arañado hasta sangrar9 Capítulo 9 Esto aún no es el verdadero dolor10 Capítulo 10 Grita, muñeca, grita11 Capítulo 11 Y dentro había cuerpos humanos12 Capítulo 12 Con los dientes apretados hasta el dolor13 Capítulo 13 Existir en un ciclo infinito de dolor14 Capítulo 14 Ya soy una muerta15 Capítulo 15 A través de la húmeda oscuridad del camino16 Capítulo 16 ¿De qué material es tu cuerpo 17 Capítulo 17 El mañana es más sabio que la noche18 Capítulo 18 Una mirada de pura furia19 Capítulo 19 Lo reconocí por sus pasos20 Capítulo 20 El niño mordió a uno de los policías21 Capítulo 21 El alboroto en el basurero22 Capítulo 22 Todavía está grave, pero va a sobrevivir23 Capítulo 23 Parecía que se había olvidado para siempre24 Capítulo 24 El accidente no ocurrió por casualidad25 Capítulo 25 Él volvió a intentar quebrarme26 Capítulo 26 ¿Qué me amenaza en su casa 27 Capítulo 27 La puerta estaba cerrada con llave28 Capítulo 28 Esos recuerdos son imposibles de borrar29 Capítulo 29 Infinito calor y ternura30 Capítulo 30 Dejar cada momento en la memoria31 Capítulo 31 Mi cuerpo respondía con un dolor sordo32 Capítulo 32 ¡Otra vez tú, maldita alucinación!33 Capítulo 33 Eso todo es por mi culpa34 Capítulo 34 Y nuevamente, la casa odiada35 Capítulo 35 Ahora eres mi padre36 Capítulo 36 El sexo con él fue doloroso37 Capítulo 37 Eso es algo que él no podrá quitarme38 Capítulo 38 De nuevo el sabor de las lágrimas y la sangre en los labios39 Capítulo 39 Y él me dejó...40 Capítulo 40 Cuando desaparece la última chispa de esperanza41 Capítulo 41 Los medicamentos de allí servirán42 Capítulo 42 ¡Lo que hizo ayer!43 Capítulo 43 Tienes una tráquea tan frágil44 Capítulo 44 La tortura de la suspensión45 Capítulo 45 Una franja roja de sangre espesa46 Capítulo 46 Muñeca rota47 Capítulo 47 Así huele el miedo48 Capítulo 48 La conciencia de mi propia impotencia49 Capítulo 49 Ese miedo vuelve a apretar mi garganta50 Capítulo 50 Un plan simplemente loco51 Capítulo 51 Una mirada al pasado52 Capítulo 52 ¡Arde, arde brillante, para que no se apague!53 Capítulo 53 ¿Tengo alguna otra opción 54 Capítulo 54 Almas gemelas55 Capítulo 55 No caer en la vergüenza56 Capítulo 56 Ella era la luz57 Capítulo 57 Estas cicatrices son mi fuerza58 Capítulo 58 El sexo con él rozaba el límite59 Capítulo 59 Esto se desvanecerá con el tiempo...60 Capítulo 60 ¿Hasta dónde llegará mi paciencia 61 Capítulo 61 Estas heridas nunca sanan62 Capítulo 62 ¿Cuál es el sentido de todo esto 63 Capítulo 63 Es un castigo por mi imprudencia64 Capítulo 64 Este mundo es cruel65 Capítulo 65 No puedes rendirte tan fácilmente66 Capítulo 66 Ella no era tan sanguinaria67 Capítulo 67 ¿Él va a sobrevivir 68 Capítulo 68 ¿Será este mi oportunidad 69 Capítulo 69 ¡Todos ellos son traidores!70 Capítulo 70 Su principal asunto de toda la vida71 Capítulo 71 La realización de un sueño72 Capítulo 72 Nuevo hogar, nueva vida73 Capítulo 73 Solo en los cuentos de hadas ocurre esto74 Capítulo 74 En lugar de epílogo