Me Cambiaste La VIDA
rn
ar de su mal genio sigue viéndose bonita y no sé porque esta clase de pensamientos cruzan por mi cabeza... desde que me puse a investigarla aun antes de conocerla, sentà curiosidad por su vida, la veÃa cuando salÃa al súper o las veces que fue a Fragrance (F
de un hombre y eso lo tengo claro... si fuera una oportunista ya hubiese intentado seducirme o llevarme a la cama sin previo aviso y lo que e
te cuando siente mis p
y me la deja estirada, entrando al departamento ―Esta bien... entendà que eres una niñita inmadura, que soluciona las cosas con groserÃas,
à me respetas, el hecho de que tengamos un contrato firmado por mutuo acuerdo, no te da derec
sus insultos y sin pensarlo dos veces, llevo mi brazo a su cintura para pegarla a mÃ, haciendo conexión con el oscuro de sus ojos, que ahora me parecen los más be
en mis brazos, y no sé si será el momento, pero el olor
tira. Damelis tu eres la indicada para esto... no encuentro a otra mujer tan perfecta como tú ―
otra cosa ―Me hab
s ―Res
ser tu mujer... es decir... no solo d
la palabra y
i.
ieras con tus obligaciones como esposa ¿lo a
una fresa, ruborizado... más que todo en sus mejillas, ella no deja de mirarme y en fracción de segundos lleva su brazo al mÃo
ro niega esquivando su mirada ―Me
aro
vez que me voy a casar y bajo estas condi
estos 8 meses que estaremos juntos, porque nuestro matrimonio durara 4 meses al igual que nuestro noviazgo...
no? ―I
el momento. Yo me entiendo ―Con
minar de beber el jugo de fresa y yo sigo sus pasos acomodándome
s? ―Averiguo toman
hombre que lo tiene todo... pero detrás de esa fachada se esconde un hombre que no quiere t
ivir con mis problemas ―Confieso mientras me voy levantando de este
as? ―Pr
. no me extrañes tanto, maña
―Responde y sigue mis
as noches bonita) ―Me d
a mansión Domenech donde seguramente tendré que verle la cara de amargada a Margarita Lans, ni se imaginan la sorpresita que les tengo preparada para el dÃa del desfile, si Felipe por