Reconquistando A La Esposa Del Ceo

e la había encontrado, su mente no había tenido descanso. Había pasado seis años sin saber nad

a la puerta y g

. ¿puedo

o resp

esta vez con un p

cesito hab

enc

r en el pecho. ¿Estaba do

a puerta no se movió. E

a una bue

a. Sofía ya estaba demasiado alterada desde que la trajeron, y después de lo qu

orar la posibilidad de

avor. Solo dime

a

se volvió

ones. Si tumbaba la puerta y la encontraba en un

y algo malo ocurría...

eó la puerta con

firme-. No quiero asustarte, per

, pero no hubo reacc

inquiet

ejó unos pasos, tomó impulso

jió, pero no

tro g

ot

a se partió y la puer

u mirada recorriendo la habit

incón, abrazando sus

si estuviera atrapada en algún

fía

o reac

n la garganta. Esa no er

mente, cuidando

o... Antonio.

la mirada. Sus ojos est

con la voz quebrada-. ¿Por qué s

que algo dentro

ía tiempo d

y, sin tocarla, le habló co

real. Y voy a ayudar

u rostro había algo que

ed

dolió más que

servándola con el corazón latiéndole con fuerza

itió en voz baja-. No

ión era errática, sus hombros

nte, tratando de contener la ira qu

ía se cubrió el rostro con las manos. S

no pu

nclinó un poco más hacia ella,

responder. Su

ar en ti... No

en el pecho. Era como un pu

lo rec

ecordaba su amor. No recordaba

ntre ambos er

tando de encontrar las palabras correctas. Pero, antes de que pudi

.. tene

l instante. Todavía tení

ella se encogió aún más, como

momento para

bló con la mayo

Sofía. Y voy a encontrarte a ti,

puesta, salió d

trás de él, su expresi

s algo útil -le

en contacto con el vehículo negro en má

onio brillaron

lo. A

aradero de su hija, haría lo que fu

, no tendr

archarse sin inten

ergirse en la brutalidad de la cacería en la que se habí

golpeó la puerta ni anunció su presenc

dida y la respiración agitada. Parecía un ave frág

o cerca, pero tampoco demasiado lejos. No

e nunca antes había int

ra

, profundo... un e

imple, pero espe

los días en los que su amor era un refugio y no una torment

o, Sofía no

co, su respira

s dejaron

lo más inesp

a rodó por

susurró Sofía, co

ontuvo el

como si estuviera tratando de recordar

un a

Frágil. P

nada. Solo sig

de traerla de vuelta, l

que esperar