Perfect Doom
Me
iem
otas es molesto y avasallador. Es una de las etapas del año donde debemos permanecer juntos en familia, cantar villancico
de tortuga con mangas largas y unas botas de tacón cuadrado que me ayudan a darme ese toque elegante, pero sutil. Suelto un suspiro, dejando mis labios un poco en
é apoderándose de mis sentidos y las hermosas luces navideñas que cuelgan de las millones de tiendas que s
con el recuerdo cont
a empresa de publicidad donde llevo meses de interna. Deslumbro a a
los folios a mi pecho, elevando las comisuras de mis labios en una sonrisa mientras escucho los murmullos de los que aún esperan su
a ch
la
re azules con verde son la combinación perfecta, sus labios finos con
r?; ¿Cómo te fu
sorprendente, pero gracias a tus co
solo debías dejar de pen
ce girar mi rostro para encontrarme
aste de tú compa
biendo como las puertas del ascensor se abr
, cuando un agarre en mi
rás las va
o -contesto besando su coronilla para a toda marcha emás desiertos de la cuarta planta en donde la mayor
gotas de sudor por el miedo que expulsan mis poros es solo un componente que no me fascina; lamo mis labios, con la frialdad volviendo a hacer acto de aparición. Por las venta
que se intensifica con cada día que pasa y con cada momento que transcurre; a
en tonterías o en mis emociones. Papá solía mencionarlo frecuen
ista en el reloj rosa que se
0 A
ier
suspiro
e me ma
es una persona obsesionada por el control es algo normal que hasta
r dejar de funcionar cua
sin embargo, me percato constantemente que el mismo destino es amante a jugarme malas bromas que para mi la verdad que no tienen mucha gracia. Camino cada vez más
ez, fijando mis ojos color cielo en el reloj q
35
mil vece
para llegar a mí destino, algu
señorita
rada gacha por la ve
oco de aquellos ojos que cada vez que me miraban, podía sentir esa sensación de que estaba descubriendo cada parte
s que el despertad
blor de mis manos causa que de un golpe derrame el
ier
ieron y tragué en seco
to, lo sie
entrada ahí, resurgiendo mil temores dentro de mi. Tomé una de mis toallitas
siento d
impo
portancia c
entrevista del empresario del momento para la nueva c
despe
ellizcando el puente
uando la desp
ocanada de aire con esa inc
í le dejo l
legué en segundos a mi oficina pegando mi espalda a la pared con color
é me pasa
en el gran escritorio bien organizado de mi oficina mientras me pasaba la mano por mis suaves cabellos rubios. Una corriente de aire entr
el lugar me estaba absorbien
os. Llevo días sin poder pegar ojo con la mente pensando en los dramas existenciales que vivo la mayo
preguntas que se hacían algunas personas, revisando en Internet si estaban correctas y no traspasaban el ámbito personal. Solté un suspiro de desesperación al darme cuenta de mi media aburrida
i tarea sonando con la suave voz d
Al
o una súpe
buena, mi día no ha
do b
uento. ¿Por q
una bocanada de ai
está de
que solo boqueó como pez fuera del agua con mi gargan
Qu
estaría por dos
con la incertidumbre apoderándose de mí interior-, quiere verte, me llamó para que te diera la no
ños; volvería hoy, nos encontraríamos por fin. Mis ojos se llenaron de lágr
¿Estás
gabán, con una sonrisa t
aquí
decidido a un reen
vuelo ya debe e
ograba algo o lo veía, él era eso que siempre soñé volver a ver. Llegué a la fría calle en minutos liberando mí mano izquierda para tomar
o internacion
dejes así, d
ino, hablar
en, no pierdo la esperanza de que lleguen a ser creados. Llevo enamorada de mí mejor amigo de la infancia desde que tengo uso de memoria, pero al ser tímida, no t
jos verdes era poseedora de la misma belleza de aquel chico. Desde la distancia eras capaz de saber que tení
idea fija en mí cabeza, una que no desapareció ni siquiera el día que lo vi marcharse por aquella puerta de embarque dónde sin más nos dijimos adiós