Amor, Ambición y traición

ensión diferente. No era una simple charla de negocios ni un recordatorio de lo que debía hacer para ganarse su lugar en el imperio Blackwell. Maxi

te y mirada calculadora. En esta ocasión, no había whisky, ni saludo cordial. Maximus lo miró con una frial

ordenó, sin molesta

ía sobre él antes de que siquiera comenzara. Había algo inquietante en el sil

damente, cruzando los

r -empezó, con una calma peligrosa-. Sobre

e había revelado la noche anterior, sobre Evelyn y su propio padre, el mundo de Daniel se sentía aún más incie

e habría permitido caer en la trampa de un romance con Clara. Hubiera observado desde las sombras cómo te consumías en un amor sin futuro, solo para lueg

l escuchar esas palabras. El tono de Maximus era afilado, como si

a intención de dejar que cometas ese error. He trabajado demasiado para moldearte en lo que debes se

ximus hablaba del amor, como si lo viera como una plaga, algo que debía ser erradicado a cualquier costo. Y,

ecuación, ¿verdad? -preguntó

a, confundido por el ca

decir? -respon

ando los codos sobre el escritorio, su

na vez pensaste en casarte con ella, olvídalo. Clara es mi hija, sí, pero su papel no es el

s era implacable, pero nunca había considerado que el hombre pudi

pciones"? -preguntó Daniel, esf

evemente, un ges

ta que había sobre su escritorio y entregándosela a Daniel-. Todas de famil

o a Maximus, intentando comprender el alcance de lo que el hombre esta

na decisión que debes tomar si quieres seguir adelante. No puedes casarte con cualquiera. Las familias como la nuestra no se permi

o nivel. El mundo en el que ahora vivía no era como el de la gente común. Todo estaba calculado, cada movimiento tenía consecuen

una de ellas? -preguntó, mirando

exasperación y paciencia, como si estuviera lidiand

imera gran decisión cuando mataste a Joshua. Esto es solo el siguiente paso. Si piensas que puedes sobrevivir en este mundo tomando d

Sabía que el momento había llegado. Tendría que

s para asegurar tu futuro y el de Blackwell Enterprises -continuó Maximus, señala

otra prueba, otro desafío impuesto por Maximus. Y aunque todo dentro de él deseaba reb

erta, Maximus habló una vez

as familias poderosas como la nuestra saben esto, y es por e

la carpeta pesada en sus man