Destino Cruzados
con Alejandro. El recibidor estaba en silencio, y el olor a comida se filtraba desde la cocina.
, y antes de que pudiera cambiarme, David apare
tono alegre-. ¿Cómo
tir con él lo que había ocurrido. Alejandro había sacudido mi
n la oficina -respondí,
e notaba algo. No estaba del todo conven
a? Yo me encargaré de la cena esta noche
ducha rápida, dejando que el agua caliente me relajara y borrara un poco de la tensión que aún sentía en mi cuerpo. Mientr
ón. ¿Qué significaba todo esto? ¿Por qué tenía que apare
de ordenar mis pensamientos. No podía negar que parte de mí deseaba que las cosa
sencilla pero apetitosa: pasta con salsa de tomate y una ensalada fresca. La cocina estaba inundada con el arntando poner un tono alegre en mi
ó, sirviendo los platos-. Espero
cuando, pero parecía respetar mi necesidad de procesar lo que había pasado. Agrad
cio-. Me parece que algo te preocupa.
odía confiar en él, pero no quería preocup
abajo -mentí suavemente, aunque mi tono n
. Continuamos comiendo, y el ambiente se volvió más relajado con
tamos en el sofá para ver una película. Me acurruqué a su lado, inten
ía a partir de ahora, si mis sentimientos por él podían cambiar el rumbo de mi vida. Pero por el momento, traté de en
-dije, mirando a David m
se que algo te esta ocurriendo pero no voy a presionarte, me lo conta
ue estoy demasiado full con el t
iro fij
do mantenerte darte todos tus
ue me mantengan, quiero trabajar, cr
levanto y se fue, agradeci en