Enamorada del hijo del jefe
darle. Sus ojos me recorren de arriba abajo, observando mi moño peina
cesitas? , dice le
z suena más curiosa
critorio. ̶ Un po
, claro. Un poco de diversión.
ue a mí me
. Le fulmino con la mirada. ̶ Gracias. Lo tendré en cuenta
de mi mesa. ̶ Crees que me
oner los ojos en blanco. En lugar de
ira hacia la ciudad. ̶ Me divierto bastante, pero
e fiesta, mujeriego... Mu
la ventana. ̶ ¿Y tú, Damaris ? ¿Qué haces para di
go más que dive
hacia mí. ̶ Tienes razón, lo hay. También hay pasión, emoción, ries
norar la forma en que su camisa se estira sobre sus
rta y se detiene antes de salir. ̶ Damaris , dice, volviendo a mi
respuesta perfecta que borre esa sonrisa de su cara. Pero un
ne r
ntando meters
encima del hombro: ̶ Has
s Fernando , suelto el aliento
elte? Susurr
able de autodisciplina y concentración. Trazo el borde de mi e
bé
ivilegios, protegido de
oño sa
pecialmente una tan ridícula como Fernando Crawl . Sin embargo, en algún lug
m
a romper l
otro lado de los meticulos
a el mundo? ¿Me
ndo a mi rebelde interior. No ha
vido
por ella e inmediatamente mis ojos se
itente?
NTE: Reunión oblig
de
mente se llena de lo
ari
te email te e
esta tarde a las 2:00 PM. La reu
egúrese de ll
m
o Cr
gado, Corporac
un mismo sitio: Fernando . ¿Podría haber causa
orona a mi alrededor. Fernando Crawl , el playboy multimillonar
NAN
la última planta y subo en ascen
, sabiendo que, una vez más, ha manipulado las piezas de ajedrez de mi vida para sus deseos egoístas. El
comprado toda la empresa
sorpresa se dibuja en su rostro antes
hijo, tienes
la mano. ̶ Esto no es un puto juego, papá. Son los medios de vida de la gente
por ti. Quiero que triunfes, pero no así, no
se cierran en puños, el blanco de mis nudillos resalta sobre
lo mejor
do, pero es demasiado tar
mí no es lo que tú q
r con que me compre la empresa o el trabajo, sino con el respeto, la libertad y el derecho a tomar mis propias decis
rabajaré en Corp. Prestigio . Pero con mis condiciones . Levanto un dedo.
des manejar eso, Fernando
e. ̶ Puedo soportarlo, papá. Así d
intrigado. ̶ ¿Y l
eguir mis propios proyectos. Haré mi propio camino, i