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Jenn.

Capítulo 4 Tres.

Palabras:2943    |    Actualizado en: 17/04/2024

suk

a así pensar en todo lo que tengo que hacer para encontra

on el bastardo de Kang qué no hace más que joderme la vida.

ya tenemos las grabaciones de la cámara de aquella noche, el técnico vien

—palmeé su hombro—

arrillo para

amos a los alemanes están en el almac

bajo haces, mereces

una reverenc

s mi mano derecha, no confío

ad esta c

cesito que me encuentres un

inme

rsona a como de lugar. Vio todo lo que hicimos con Lee, no puedo d

nicio no quería por que quería estudiar y ser médico, pero así es el mundo de

prostituta y tuvo a mi padre y el linaje siguió. Si, soy hijo de una prostituta China quien me dejó en la calle cuando tenía c

pude hacerlo por el bastardo de mi padre. Ese es el destino qu

al los que fuesen leales conmigo. Y cuando asesine al bastardo de mi padre, quede al mando de los Yak

sonas de Japon pero solo para darles asilo, son personas que son perseguidas por las guerras y la corrupción. No pienso que soy la mejor persona del mundo,

de utensilios Japoneses al igual de telas de la mejor calidad. Ese es mi señuelo pa

buen salario y educación. Hace ocho años compré un edificio donde habitan solamente

hacen, no hay nada que un par de billetes no lo solucionen, por que en e

dejarse llevar por unos cuantos

el mas poderoso es el

esta la chic

a Japonesa

mi habitación— vamos l

.

estar con esa chica me ha puesto de mal humor. Aunque de mi mente no salía aquella chica del billete.

su nombr

ta eso es

iere que vaya

es un maldito g

o chino. El bastardo es demasiado inteligente para que negarlo, se mueve bien en el mundo de los negocios, pero no puedo permiti

quitó hace dos semanas diez mil dólares, h

mera vez que veo tu casa... Te di diez mil dólares, cr

ba a pagarle pero

se? —le sonreí y mire a Kyoto

nada

no me interesa —saque mi ar

señor Tanaka —b

pero tuve que esconderla al ver salir de alguna habitación a un par de niños, uno de ellos que

di? —no respondió, solo sollozaba

eñor y compr

el dinero para alimentar a tus hijos... —me reí— vaya que no me sorprend

e, vamo

s que le hacen daño a los niños, yo era uno cuando mi padre me hizo asesinar a una perso

can, eso siempre l

á la madre

n otro hombre y l

s que no tienen la culpa de lo que hizo su madre.. —le tomé el cabello y le puse el arma debajo del mentón—, vas a pagarme, no se como car

señ-

illa— tus hijos se irán a ot

son mi

irlo —me puse de pie y guarde mi arma

debe tener al menos cinco años y el grande unos ocho, no entiendo por qu

ere que los l

de Hirai, ella sabra

fe, ¿que

e Kang, encargate

segur

o defenderme solo —asintió—.

a empresa Kang. El bastardo cree que puede llamarme cuando se le da la g

stardo es listo, ingenioso y menos impulsivo. Hace todo más por las sombras aunque eso

sesino si jod

grese a la empresa Kang. El b

en soy no pueden detenerme. Llegue a su oficina y abri.

tarde

rente a el— ¿que es lo que qu

er un cigarrillo—, solo quiero saber si has

os nada más. Mañana me

inútil —volteó el monitor

ona, era una chica por que podía verse una pequeña parte de su rostro además de su cabel

r, era una

llegar, Lee la estaba esperando. Ese maldito s

n fue esa periodista, ahi tiene una cámara y al

eso estamos

ya tuvieras a la policía encima de ti o de mi. Lo

¿que haremos? Yo no

hora es averiguar si hablo con alguien sobre la g

o entiendo,

sa—, mataste a Lee sin dejarlo

nada mas que d

o. No se como el piensa hacer lo que hará, pero espero que la encuentre quien quiera

o antes de volver a mis negocios. Saludé los empl

prec

que dos niños llegarán a la

madre se iba a prostituir o se drogaba. Cuando obtuve el puesto en la organización, le di un departamento en modo de agradecimiento al igual que abrí una casa ho

que no te preoc

ceria mucho,

Sa

enos fuerte así qu

ro b

bajo, ella y Kyoto son las personas en las que mas confio, son mi

restaurante hasta encontrar a la voz, una frondosa rizada cabellera captó mi atención. Desde la b

ás en mi vida había visto a un

e puesta en mi vista— p

gra

dejado de mirar a aque

re —mi vista no se apartaba de ella

é no vas a

o quiero parecer un

o sorprendida—, ¿des

e me siento at

me dices algo como eso.

mpre consigo l

i vas a llegar a la chica solo para divertirte, es mejor que te detengas,

azón? No

la chica frente a ella se puso de pie y se fue a toda prisa. Le un trago a

go al escucharme—, l

ó— eres el chico de

no— pero puedes llamarm

e estas siguiendo

. Te vi y te reconocí de inmediato, un r

—rió

ecargue en la mesa—, solo quiero una c

de conversac

es que te invito a comer, a

que cocina, jamas habia probado u

gustado —le sonreí— cue

esponderte? —se

lo quie

qui, no te diré donde vi

ork, vivo al otro lado de la ciudad, este

mis palabras y decía una que otra cosa trivial sobre ella. Ejemplo es de que ti

tido del humor, le gusta la comida y la música. Jamás me había entretenido t

.

tard

saba, le invité la cena hasta que llegó el momento

buena cha

mismo, mi noche n

a dolido mucho

pero hablando en serio,

ue a un taxi—, te pedí un taxi, po

isto R

agradable hablar conti

—sonrió divertida— si no, puedes ped

a intentarlo —el taxi había lleg

e —me dio una

mbre del taxi. Era uno de mis hombres que trabajaba de taxista en sus

hi kanojo ni nanika attara, watashi wa anata o koroshimas

se

ós J

tó demasiado. Tengo que controlarme, no puedo volverme obsesivo e investigarla para sab

y divertida, es todo lo

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