Tentaciones en guerra

rtadillas, rogando

a cocina se enc

la pared al mismo tiempo que me llev

n Fernando, con el cretino del rubito de la discoteca y con Nino para hacer de es

chero de la entradita, mientras el latido de mi

— pregunta cuando

forzando una son

mprano vuelvo má

endo una muec

rta que tienes dejas de

leja, cuando oigo la puerta de la

gemos un vaso. Batallando entre empujones, el turno en el grifo tratando de lle

hacéi

pá, bebi

bien improvisar como a Nino, así que no me voy a excus

lza su

es un po

s —. Se detiene a mirar el reloj que le regalé en s

atarlo, pero me contengo, giro h

ierran tarde y mientras limpiamos y hacemos c

lvas a casa sola en mitad de la n

s papá. Ya me h

n sorpr

con la falta que

e había enviado a unos de sus gorilas con el pago d

que trabajo, mejor dicho, trabajé durante dos meses

ue exhibo mi cuerpo frente a los hombres pa

, luego me mira —. No te preocupes. Encontrarás algo

ja

ue si no pagamos ochocientos cincuenta euros iremos a la puta calle la próxima semana. No le culpo. Quiere cobrar. Debo d

gar el alquiler. Tiene razón mi hermano en decir que, si apretamos un

adentra a la cocina, se pone a preparar l

a? — b

ía del hostal donde trabajó casi toda su vida. De eso no hace más de cinco meses. Tuve que dejar la universid

to dorm

— me apoya solo para escaquears

. —... Venga solo será un momento... Nora, cariño desayuna

ano al pecho, teatral, imitando a Nino, es lo que

que... —la palma de su mano

oz de hombrecillo rudo que tiene últimamente, e improvisó. —. Jur

n mientras aparto su mano

alto, pero se arrepiente en el último momento. Trata de calmarse, por lo visto tiene algo

lta un disimulado suspiro de alivio, cuadra los hombros

lipo con

o, pensando en cómo se le ha ido la p

Nos observa desde el lado opuesto con las

o una muy bu

mucho mejor cuidado y más feliz. Otra cosa era mi hermano, él no lo aceptaría. Hemos tenido esa conversación mil

ocó la

comenzó a celebrar como lo qu

gira para poner las tostadas en la tostadora. —... También se puede decir que hay una regularc

ra son

quieren

cómplice. Que papá nos diera a ele

papá — m

mi papá sería una mala o la regular, com

rabajo por cuatro meses

lujo

de estaba la trampa? Algo no cua

razo y miro intuitiva a mi

vamos a C

ae la mandíb

.. —susu

a boca d

.. ¿Cómo... cuándo? — si estoy medio adormila

coloca al lado de papá. Acto seguido pone la mano en su fre

, resp

e recibir la colleja qu

los dedos, muy serio —. Punto dos, no tengo fiebre. Punto tres, no e

pica frase con el punto cinco para

la silla a plomo, me miró

o perdimos. Ahora s

ra cuando

ver papá. Esperamos

que no me dejáis ha

camarero en un hotel de cinco estrellas. En San Diego, California. La oferta lle

recisamente en San no sé qué... que no sabes ni do

o ner

el mapa ¡

.. A ver si te están tomando el pelo o yo qué sé papá. Mira que en internet hay

e ir a su puta bola, rebelándose contra todos, noto la madurez

o padre, me saca de mi pensamiento. Acaricio

, o idiota? ¿Me estás diciendo

— le gruñe, alejándose

ecir imposible. Es el más sereno de los dos, por el

pas que y

A donde vaya yo v

ilar todo esto, Nino sale

que yo diga! ¡En dos días salimos... así qu

s a romper el tímp

os vamos. Eso seguro. Otra cosa no, pero a garganta

ciende... Y yo que me caliento y dispar

uiero

o desde mayo, para la adaptación. Con un salario a lo que ganaría aquí en todo el año. La empresa cadena de hoteles se hace c

qué o

to la

iasmado, desde hace muchísimo tiemp

no para que se

ente las dejamos pasar sin saber si era bueno o no en verdad. Y cuando la oportunidad pasa, después nos arrepentimos

de la sil

onmigo papá, a mí nada me r

o a mi h

n bombo, pensando en todo lo ocurrido en las últimas horas. Me coloco el pijama

a con los nud

nzando una pelota de tenis, a

ómo

ta. Lanza la pelota, que rebota en la pared, é

ces m

enes a convencerme te

rco a

ormir no voy a

hueco a su lado. Me quito las zapatillas y m

s en si

el pueblo con la abuela y la tita Choni... luego para madrid otra vez y ¿a

ta. Me hace graci

ves nor

s de vacaciones y te ahorras el último mes de clase... Imagínate: Un hot

na sonrisita socarrona, le conozc

os de luj

¿Crees qu

antes de

que sé es que aquí no tenemos nada

cillo le da ese toque perfecto varonil. Es tan guapo que no me extraña que se tenga que quitar a las niñas de encima a pat

nes algún ligue especial aquí ¿verdad? B

sabes que

mi cabeza mientras entierro mi cara en el hueco de su cuello

apriete a

cursilerías para mi familia.

ntradecir, en es

propia el dolor de papá y fue cruel. No solo perdimos a mamá, sino que p

imos nuestro duelo, a nuestra manera. Los dos llevamos alfileres clavados

edio dormida —... Nos vamo