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Follando con el Jefe

Capítulo 4 La chica nueva

Palabras:2005    |    Actualizado en: 20/03/2024

encuentras a sus espaldas y en ese momento que el CEO de

de la mujer —. Quiero que te

sentir que Mauricio no estaba conten

o o no lo

el baño, la rubia toma una toalla para luego alejarse. A veces no conseguía

te todo el tiempo que se han estado viendo mostraba varias fa

o pretendía de

agino que Maryin y su hija habían terminado las labores pendi

ido una mierda

debía al estrés que le producía su empresa, era otra cosa que n

ue hiciera apaciguaba esa inquietud que lo agobiaba. Mientra

erpo, no debía de estar pensando en esas tonterías. En lo único que d

as para ir al trabajo completamente relajado y repuesto. La noche que tuvo

se encontrab

o lo había estado haciendo últimamente. Gracia muerde sus labios al mir

e al mirar a ese hombre completamente desnudo? Por desgracia para ella, siempre se d

nte debía ser muy complaciente. En eso ve que cierra el grifo de la llave

desayunar. Solo tomaría un sorbo de café para marcharse. En cuan

ocina es abierta, su desayuno y su café venían en camino, solo que exi

ia él con la bandeja de metal en sus manos. Ella lo estaba mirando f

a en la mesa y luego le

causo una gran impresión en el CEO —. Lamento la demora —ella empieza servir la

puesto que era la primera

, soy sobrina de

obri

nueva empleada que

odo lo que estaba haciendo lo hacía con torpeza. Cuando su tía le

de su prima Gracia. Era un empresario multimillonario reconocido por ser un p

ucho con una modelo muy famosa, las noticias decían que

ola casi se muere del infarto. Su tía jamás le comento que trabajaba para ese hombre

rme y parecía muy fuerte. Pero lo más temible de él era esa mirada que t

daba mied

puesto

udeando, Mauricio tomo asiento,

Am

S

aza con café para darle un

había dicho lo que debía decir, pero

ece nada más,

so a la cocina. Necesitaba tranquilizarse o no continuaría ni un solo día más en ese tra

s? —la expresión interrogativa

voy a

ia, el señor Rinald

te dijo nad

que todo e

u prima, se queda pensando y presiente que no era bue

y pónganse hacer su deberes —o

yo recogeré la mesa —Gr

eber, Amber tiene ot

mesa a su prima para que fuese adaptándose por lo más sencillo. Pero todo eso le

repentinamente deseo quedarse. Al cabo de algunos minutos levan

dez que curiosamente lo llena de curiosidad. Afina

egunta al mismo tiempo q

rcibido desde que la vio entrar,

s con

o rápido, ella no lo mi

r, mí

ella siente que se iba a infartar en

le ofrece

el desayuno de a

a con la voz t

, t

el CEO experimento una especie de sensación

nstante se pone en pie lo que complica la situa

supuesto que no

ro que mañana seas

dare a t

cia que el CEO termina por relamer sus l

r, unos que eran muy rosados para ser naturales —. Dile

S

ombre se aleja por un corredor. En ese momento ella traga saliva

ego relame sus labios y recuerda como él la observo de una manera muy extraña

en tonterías. Seguramente eran ideas suyas. La joven term

el tiempo en revisar algunos de sus correos. Pero a

naldi, ¿p

yin y tom

cede

la mujer se te

ha hecho al

nta sus manos

es muy niña para trabajar? —Ma

d señor, tiene 19 años, pu

, al principio creyó que era más jov

que sea ella quien sirva mi desayuno, lleve mi ropa a mi ha

puesto señor, c

—dice poniéndose en pie

se

uricio se queda observando la puerta. Desde hace mucho tiempo qu

el ceño al mismo tiempo que introduce las manos en sus bolsillos. Recuerda la mir

ando una media sonrisa

a cama de su jefe. Ella traga saliva al mirar esa enorme cama con sabanas d

era muy lujoso, i

u tía le había dado órdenes y debía cumplirlas al pie de la letra. Necesitaba el empleo

opa que debió llevarse a la lavandería, pero

? Llevo más ropa

necesitabas alg

explico mi tía, creo que

trabajo, esperamos a ver que

con su tía. Le preocupaba que le pusieras muchas trabas al asunto y su tía la

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