Fronteras del Infinito: La Odisea de Terry

eración, dotado de magia y poder psiónico, me permitió crearlo sin mayor esfuerzo. Sin embargo, el verdadero núcleo de mi poder no deriva de mis habilidades, sino de una gema

ocida como Gema Ætheris, una poderosa fusión de elementos que la convirtió en una supergema con la capacidad de manipular el tiempo, el espacio, la mente, l

empre en el mismo lugar: una cueva cerca de un volcán inactivo, cuya actividad cesó con la creación de la gema. Los científicos de nuestra época sugieren que su presencia alteró el entorno de maneras ini

ncia de los demás, que traían juegos y distracciones para soportar la soledad de su vigilia, mi padre prefería la compañía de

su mente enfocada en el presente, conversando con la gema, hasta que un día, Ætheris aprendió a hablar el idioma de los humanos y respondió. Pueden imagina

guntó, temeroso de est

n propósito destinado a transformar no solo la existencia de mi padre, sino el destino de todos los implicados en es

sombro, mi padre desafiaba la r

precipitadamente, su mano instintivamente buscando su arma para asegurarse de que el perímetro

ris, con una serenidad que contra

víctima de una broma, mi pa

pero es hora de terminarla —dijo,

inédita, tomando la forma humana de mi padre. Una luz cegadora precedió este acto, y al rec

do demasiado lejos —exclamó, aún sin c

Solo imagina otra, y la crearé —ofreció Ætheris, most

uperando el inicial desconcierto. Su mirada buscó la gema, pero ya

tú... Æ

z y la forma de mi padre—. Tengo el poder

ante para confirmar su realidad. Ætheris, por su parte, disfrutaba la genuina sorpre

esde mi creación, y la llegada de los humanos ha sido un cambio bienvenido, aunque no todos me han agradado como tú —

erso y alteraría el curso de nuestra historia. La conexión entre un ser de poder inimaginable y un simple guardián hu

lexionó en voz alta, maravillado por la profu

cidido hablar conmigo? —se preguntó, su voz car

. Estás en el umbral de un camino que te llevará a descubrir el verdadero potencial dentro de ti, un po

sco Javier, su duda inicial empezando

destino que supera con creces el de tus compañeros —aseguró

a sorpresa en la voz de Fr

leer las mentes, percibir el alma de los seres, manipular el tiempo y crear vida. Mi pode

sombro y admiración evidentes, como si hubiera d

, aprender y cumplir con la misión que me fue encomendada —proclamó Æt

erso? —inquirió Francisco Javier, su curiosidad des

fin, dotada de energía psiónica, una fuerza que me permite influir en la realidad a través del poder mental y psíq

pensamientos sobre los innumerables mundos y experiencias que

o comprenderán tu capacidad de moverte libremente. Podrían pensar que has sido robada o, peo

la gema, sino que también abría un horizonte de posibilidades y desafíos que ambos enfrentarían

omó un giro inesperado cuando Ætheris sugirió una solución

alquier cosa para obtenerlo. Una opción sería hacer

rmado ante la idea, n

llar l

s, tengo planes para ti —dijo Ætheris, mirándolo con una i

ener planeado para alguien como él, F

partir tus pl

eta lejano en la galaxia para comenzar una nueva vida juntos. Me dividiré en tres partes para disminuir la percepción de mi poder entre los humanos, creando tres cuerpos físicos. Serás mi padre, y te proporcionaré una familia, conocimientos

iderando la magnitud d

a dos persona

ti estas personas

es, inteligentes, y nos serán de

nidad olvide nuestra existencia para

interior. La gema central, la más poderosa y que residía en mí, tenía la tarea de reunir a las demás. Nuestro padre recibió de Ætheris Cristaros, la moneda universalmente aceptada en el espacio exterior, para comenzar una nueva vida en un planeta distante, elegido po

iz de nuestra nueva vida, ahora facilitada por los Cristaros, que nos permitirían interactuar y prosperar en el vasto universo. La posesión de estos Cristaros no solo aseguraba nuestra estabilidad económica, sino que también nos otorgaba una posición social alta dentro de la sociedad intergaláctica. Este estatus privilegiado nos abría puertas en múltiples esferas, desde círculos comerciales hasta académicos