El destino de un amor
GA
dando ese
volviend
estaba muy cómoda, son unas c
mosa m
uando le obse
la idea d
e otra cara y otro cuer
obre
en unos días y saber que no la voy a ver, se
o mismo qu
o que yo
la me hac
ven a mi mente y se mezclan llevándo
a esquina de la casa de Delfina, es que esa esquina, en e
or el otro lado un comercio que cierra bastante temprano, a eso se le suma el poco movim
escentes, terminamos allí
calle, aunque más de uno lo ha hecho,
as, no hice a tiempo de alejarme demasiado de mi conquista, cuando Delfina y su amiga Olivia, dob
s, no hizo ningún comen
nterés en esa chica y lo recuerdo bien
yo tenía 17 a
siempre encontraba a otras que me
que sigue durmie
llegamos
o, Aitana estaba realmente insoportable, per
ral, es una anestesia para no sentir dolor, en realidad, ella te
a discusión muy fuerte porq
a vez que la amamantaba era u
es que su madre, pero bueno, la niña es de
la noticia que iba a posar de nuevo para playboy, su
a hiciera lo que le viniera en gana, aunque desp
y como realmente l
que ya había vuelto a trabajar y que en los eventos en donde tenía que asistir, le pagaban muy b
a tenía
pillas, si estaba yo en casa, era quién la alimenta
ás allá de todo lo que sentía por
rabajar más
o y ella se iba a trabajar, siempre con
l amor, pero ya no era con la mis
una campaña de ropa interior y que tendría que v
no la podía cuidar, a los 15 días, me dijo qu
asi dos meses los q
trabajar y realmente
aban y eso me gener
guía siendo poco, tod
que de costumbre, no solo conmig
i no tuviera pareja o u
eja ya casi
juraba qu
de todo
se a pesar de t
casa, hicimos el amor, como nunca, o c
ya tenía el pasaporte, una visa de trabajo, porque la habían contrat
el dolor
e anterior fue
pregunté, m
Ca
r con vos, aparte allá, y
mis lágrimas ca
or
abandonaba a nuestra hija, porqué no le alcanza
ad te amo, pero mi c
tiva nuestr
perando que ell
..pe
le perdoné muchas más, me quedé a vivir, sin quejarme, en un
e dolía era la indiferencia qu
ería que hiciera p
ondió q
o para dos días después,
ostaste
e alguna i
escon
rico, que no me puedas dar la vida q
te una maldita
está primero y por mi belleza
y bien económicam
yates,
tria potestad de Camila, no creo quedarme mucho t
y me lo
, ojala no sea tarde
necesito otra vid
ra hija?¿A
la
donde decía que renunciaba en forma permane
mó en indignación, e
un vacío absoluto, ella de
ojos solo me tranquilicé cuando vino la imagen de De
ente m
as, las semana
fin, volve
ño y medio y de su m
aunque por los impuestos, que son bastante al