Ella era fea 2
cio se encontró con Tomás que e
más. Santiago respiró hondo y después le dio un
—Santiago se alejó
superior, para que Santiago reaccionara de esa manera significaba que las cosa
eron en gran manera al ver aquella decoración, sol
? —inquirió con
, de verdad, perdón
n fuerza, Gera empezó a tirar copas, platos, varias cosas e
su cabeza, lo que había sido lo hizo sangrar y en
grito, sabía que no debía dejarla sola, a
ermana, creo que va a cometer una locura, ven lo más rá
enes? —inquirió Gabriel asustándose, él iba
lo hago empieza a lanzarme cos
illo, en eso escuchó como si algo se
endo? —llevó sus manos
do, pero no tuvo tiempo de preguntar, los sonidos que había en el departamento avisaban que había u
fuerte grito, se volteó para poder dejar su rostro sobre el pecho del muchacho—, tranquila, yo estoy contigo —empez
ue era culpable, nunca debió dejar que ella tuviera una relación con alguien como él, con solo observarlo supo que no la quería, al menos para poder hacerla f
película, aunque si fuera tú me hubiera puesto triste, estabas esperando es
a, toda esa bomba de mi desmayo fue apagada y dijeron que todo fue estrés, así que no iría al lanzamiento. Lo bueno es que estoy recibiendo mensajes donde quieren que me mejore,
eno de ser famoso
ega hoy ¿no? —
ezó a sentirse incó
sobre el bebé?
un gran silencio. En aquel momento se escuchó la puerta abrirse, t
dió? —preg
é llorando en el cuarto, pero llamé a Tomás y él llegó cuando me iba a ir, le
eguramente Gera debe de estar destrozando todo, puede cometer
rmana y llevó sus manos al rostro,
or para la pobre de Gera, Tomás… es un idiota completo, mejor ve a bañarte, estas muy sudado —Keidys
ntiago se levantó del mu
a gustado ver eso, lo más seguro es que yo molería a
laudia fulminando a M
ero, Mateo fue quien abrió la puerta un tanto dudoso,
e fue muy mal —soltó Mateo c
legado aún? —inquirió Tomás
eo puso el rostro m
sobre algo de la empresa, no le entendí mucho, se escuchaba bastante enojado y dijo que iba a venir a acabar todo con Keidys, que no quería verla nunca más, en serio, cuando dijo eso se escuc
irió Mateo mientras llevaba una mano a su boca, su
zada y Keidys cuando se enoja se pone como loca.
ñando —cont
matarme —Tomás pasó su lengu
r para recibir tu cast
está destrozada —Alejandra caminó hasta el m
ra, basta! —emp
se lo merece por id
ir a un buen hombre que la va a amar mucho y ojalá te lo restriegue en la cara, me encantaría estar ahí para reírme de tu mal y darte un buen golpe en esas malditas b
s manos—. No vales nada, ella es mucha carne para tan poco perro. A todas estas, ¿qué haces aquí?,
o—. Josef viene para acá y está enojado, vio la película de Keidys y dijo que allí ella sale en una parte totalmente desnuda y eso lo enfadó bastante, va a terminar todo con el
con las manos mientra
ió Alejandra—, si tan solo é
arro negro que se estaba e
un tanto nervioso al ver a Josef b
mate —pidió Tomás cerran
mbe y tampoco a ustedes —regañ
har las voces que no sonaban naba bie
la, quedó observando el rostro de J
ormó Josef entrando a la sala
voy a ir de aquí —replicó
én necesito hablar c
e cualquier ruido extraño para entrar corriendo. Keidys
película que el mundo entero dentro de poco verá, qué hermoso recibimiento tengo, ¿sabes cómo te v
razos—, Josef, solo es una película
como te gustarían ponerte si te estuvieran follando —la observó con impotencia y Keidys empezó a asustarse, no lo reconocía—. Pero
la idea que tienes de mí —a Keidys
erdad, ¡eres una maldita regalada que le gusta que todo el mundo la vea desnuda, porque así es como quieres ganarte la fama! —Jos
drios— ¡LÁRGATE!, ¡NO TE QUIERO VOLVER A VERTE EN MI VIDA!, ¡ESTÚPIDO!, ¡POCO HOMBRE!, ¡NO VENGAS A MI
ra poder hacer espacio, aunque fue de una manera bastante seca y u
pareja se trató los dejó sin saber qué hacer; nunca imaginaron que ellos serían capaces de llegar a
a de ponerse una camisa y quedó
cuidado, no te muevas de allí. ¿Por qué estás llorando?, escuché gritos y
a casa, en un impulso salió e impidió
iste a mi her
salieron
cálmate —pi
ago, cálmate
rar, nadie hace llorar a mi hermana e irse sin que yo lo muela a golpes, si eres tan macho baja, sal, cob
ntiago?! Esos son asuntos de sentirías, idiota?! ¡Hasta en el maldito cuarto se escucharon los gritos y partiste u
sef— ¡Lárgate! ¡Ya tú no tienes nada que hacer aquí! —Josef y su mejo
iago, lo arrastraron para que le hiciera paso al auto. Cuando Jos
VOY A PARTIR LA PUTA CARA, A ESTA CASA
el mueble, soltaba gritos descontroladamente, Alej
pienses más en él, recuerda que estás embarazada y que si sigues tomando estas emociones tan fue
sta yo me siento mal —Alejandra peinó su cabello— ¡Y esos otros estúpidos parecen g
ento ellos
sabiendo que eso pone más nerviosa a Keidys y ella podría perder el
a su hermana que estaba casi temblando sentada en el