ISRAEL Sed de justicia
RA
y era mi tío con un plato de comida para mí, a veces olvido hasta cenar, pero él me lo
endías dormirte sin cenar
ni pensar en cocinar -respondí mientras
o que eso no será posible con lo
ces? -pregunte
lo está buscando y supongo que te involucraras en su búsqueda
a perder mi tiempo buscándolo, de seguro algún familiar de alguna víctima se encargó de él, he hech
e asignan el caso
idaré que ese hombre algún día existió
dré a verte mañana -mi tío se retira y s
sinas por primera vez algo dentro de ti muere y con cada muerte tú dejas de ser el mismo, ya no importan las sonrisas o el a
ncierro si llegan a salir por un juez corrupto o por cumplir una pena, pues
n concluye lo mismo, es mera coincidencia o eso creen ellos, pues
es fría, pero eso a mí no me afecta en lo absoluto, noches frías he tenido muchas de
ermo, por más cansado que este, solamente puedo cerrar mis ojos dos horas y eso suele sucede
ano estaba a 40 minutos caminando, pero ahora tengo vecino a cinco minutos de mí, p
tiene amor propio o no le enseñaron a valorarse, no sé quién me da más ganas de matarlo si al marido por abusador o a ella por estúpida y pa
más serés inservibles como ellos, quizás me ca
que desaparece uno de los prisioneros que salen libre siendo culpabl
de los criminales que yo encerré sale libre y desaparece, viene a observarm
s, pero de distinto sector, él se ha obsesionado conmigo, está convencido que yo me deshice de esa basura, y es
la mayor parte de las personas que he asesinado son voladores y asesinos, también hubo algunas prostitutas, si tengo necesidades y
iera chantajearme, así que termino matando a las patas que se quier
os horas después abrí los ojos como cada mañana y tomé una ducha fr
cubran sé por donde escapar y en quien confiar, al comenzar a correr, mi vecina, la que no tiene amo
bería irse ahora que puede y que no tienen
, y siempre que me ven me saludan con educación, así hay muchas parejas en este barrio, la mayoría de los que se mudaron aquí son ancian
aré encerrado y prefiero la muerte a eso, pues yo encerré a dem