La princesa de Alfa

do plagado de pesadillas, son siemp

eníamos más tiempo que perder. Llevamos caminando casi

entrada, en la entrada hay parados dos guardias. Cuando lle

os segundos después nos dejan pasar. Y yo que pensaba

lado para otro. La verdad que esto no me gusta demasiado, no estoy aco

gar concurrido. Tampoco tenía con quién ir. Me fui de la m

i abuela era una bruja y que por es

de mi abuela. Nunca pensé en regresar aquí no me que

s colocamos al final de la fila, le pido a mi abuela que tome as

ota de las buenas. Después de dos horas de espera, el

después de doce horas que se dice pronto llega nuestro turno, y suerte que

doce horas para esto. Me parece una p

iene lo mejor, como la noche está por caer los límites d

no pensaba que lo fuéramos a necesitar. Ahora necesitamos un hospedaj

s de tantos años y nadie las ha cogido? Bueno supongo que a

todo está colocado y limpio. La verdad que no entiendo nada.

que unos amigos suyos la han estado cui

ron arrebatados mis padres. Ya se que la gente de aquí no tiene la cu

a está vacía, después miro en las ala

dólares, necesitamos cenar algo ya que no hemos comido

no hayan cerrado. Después de varios minutos caminando veo una pequeña tienda, m

me venda lo que sea, que mi abuela está mayor y necesita

que espere un momento. Después de unos min

ero y ella se niega. Me llama por mi nombr

de la Manada. Cuando me fui de aquí intenté olvidarlo todo. Ahora cu

aroma a regaliz invade mis fosas nasales, mi lob

escucho a alguien correr. Esta es la única oportunidad que tengo de huir me digo a mi misma.

ientras tanto yo tomo el camino contrario. Esperand

s roja que un tomate. Creo que el c

tar su aroma, esto no habría pasado, pero no solo no lo

tamos bien así las dos, no necesi

ás bien? Parece que venga

a y veo algo de revuelo. Solo espero, solo deseo que no me encuentre. Me da igual