LA MENTIRA: ENGAÑO AL CEO
Christopher, al salir del edificio y subirse a su vehículo, fue reflexionando sobre todo lo que le comentó Glenys. En parte tenía
razón, él con su idea fija de castigar a Amber por la traición que le había hecho, no analizó algunas cosas que hizo, por lo tanto, se sentía a veces culpable.
A pesar de que él, no dio la orden para que la golpearan desde que se enteró de esto, no ha podido evitar sentirse culpable, sobre todo por la pérdida del bebé. Él provocó muchas acciones en su contra, motivado a sus celos e incluso fue el culpable directo del accidente, en el cual casi pierde la vida.
Al arrancar en su Ferrari, hacia su Penthouse, recordó las últimas palabras de su amiga:
«Te voy a agradecer que esta información no la repitas absolutamente a nadie, porque pondrías en riesgo, otra vez, mi cargo»
Entre pensamientos, reflexiones y decisiones, Christopher desvió su camino hacia el Club, sentía que necesitaba despejarse un poco y concluir lo que sea que, tenía con Michelle. Él no entendía cómo se enredó con ella, pues nunca le inspiró confianza.