Aventura romántica del CEO

visible en la oscuridad, y sus pestañas largas y rizadas t

o molesto con él, Jeremy dejó de bromear inmediatamente

reservó la habitación más espaciosa

emy mientras veía a Keith lle

pero sin él, el jefe, la fiesta pr

laba Keith, sus dedos largos y blancos se doblaron mientras agarraba una esquina d

Keith: "Puedes ir a la empresa tarde mañana y yo te ayudaré a resolver algunos asuntos primero". L

eza para mirar a Cathryn, que estaba tumbada en la cama murmu

na cama grande y dos mesas de té en el lugar principalmente porque las persona

o al menos Keith podía ver claramente el rostro de la mujer en

La figura del hombre era perfecta, su cuerpo superior era perfecto, sus hombros eran anchos y gruesos,

suplicando que se le fuera de encima, y luego le estaba suplicando que volviera a esta

ra ducharse primero. Después de quedarse todo limpio, se sorprendió

mientras Keith tomaba su ducha, recordó lo que ella y Jordan solían hacer en su casa. Él se ducharía primero y, cuando

día ocultar su encanto. Tratando de calmarse lo mejor que pudo, Keith llevó

parecía como si estuviera en llamas, el deseo quemando sus nervios. Tenía tanta sed y estaba tan sec

a delgada y caderas altas, un pecho lleno y un cuello largo y delgado. Era la figura per

e había estado de pie junto a la cama, se inclinó y sost

ina capa de sudor se había filtrado. Su aliento le roció la

día como una llave, abriendo todos sus deseos, y cuando Keith levantó l

jadeó y tembló mient

te. En la conciencia débil, Cathryn solo escuchó una voz g

n". Keith dij

brió los ojos para buscar el cuerpo del hombre. De hecho, el hombre no era Jordan. Jordan ya la había divorciado y le había prop

oz de Cathryn tembló mie

n, y puedes ll

ento complicado, que fue tallad

licando el calor de un hombre. Las lágrimas caían de

otros hombres después del divorcio, verdad? Los suaves y dulces labios abrieron completament

intensos y más profundos, y se quitó la bata d

*

ato pudo sentir que le daba vueltas la cabeza, y le parecía que iba a estallar. Le dolía tanto la cabeza que pensó que iba a tene