Prisionera de Amor
ue había osado robarle entraría y él esperaba que se llevará una pequeña sorpresa, sí aquella chiquilla inc
no concordaba, caminaba con pasos inseguros, cómo si no estuviera acostumbrada a llevar tacones altos, su rostro reflejaba inseguridad, y miraba alrededor cómo si estuviera perdida, parecía una chiquilla asustada,
o de comensales, en la mesa había un celular, no
n breve. Por favor dígame cua
l celular sonó, y de acuerdo a su plan Lilly
y Susan D
ones; y desde luego sabes perfectamente quién so
carle...- dijo tratando de acentuar el tono dulce y temeroso, sin q
eres, al igual
r, ella me mintió...- di
ía ver a Lilly y sabía que sus gestos no concord
madre estaba haciendo!... Yo le juro que s
eres. Pues me faltan 3
pudiera verlo y explicarle!- dijo
te que el vestido te sienta de maravilla
to que el tipo podría estar viéndola, se acomodo el cabello, era
o que ya no j
amour, el juego
metro noventa, cabello rubio pálido, y los ojos más celestes que jamás había visto, se veía idéntico a las fotos de las r
r una palabra le hizo una seña al cama
a sabe que
ly observo mejor al hombre que tenía en frente y
entiendo su e
, pero lo harás al finalizar la noc
a una acompañante, el vestido de encaje negro, con transparencias, el maquillaje y los zapatos lo de
a de humillar a lo
ormente estaba concentrado en su
robaron, quiero mi dinero de vuelta, pero sé que no tienes como devolverlo, puesto que tú propia madre se llevó todo; así que tengo dos maneras de cobrarte: La prim
de perdedora, pero esa era la realidad, ella había perdido. Lucien Bonnet tenía la sartén por e
sé dónde está. Por otro lado usted es un hombre de re
pero no tengo idea de cómo se ve tu madre, ella jamá
rcaría a usted y que lo conquistaría para...- dijo realmente sorpren
mo hija, pero te aseguro que no la habría mirado, en cambio a ti, sí que te abría
i madre, ¿Cómo llego a m
cil enterarme de quienes eran y de lo que venían haciendo, pero tu madre parece se
n la peor de las condiciones, y ella no tenía idea de dónde es
ar a mi madre, ella siempre me.
Prepárate, vas a pasar el resto de tus días allí, y si f
ba horror, no sobreviviría en aquel lugar, no podía ir a
haga. Debe haber a
endida y sin aquella mirada altiv
on lo que puedas pagarme. A
ando en que podría cobrase con otra clase de cosa. Se paró
esa clase
a ir a mi habitación y negocia
si querrían el postre, para ese momento Lilly esta
uiero
, ni Lucien le
a mi habitación por favor,
a sujeto por el brazo y la llevo a rastras con él.
u decisión es ir a prisión. Y a mí, sí, que debes creerme cuando te digo qu
onnet e ir a su habitación. Una vez allí lo manejaría y vería la forma de voltear la situación a su favor. Camino delante de él y entro en el a
upo que había sido un error, aquel hombre tenía