El italiano
Nunca he tenido una aventura de una noche, y maldita sea, me la merezco. Esto puede ser un pase de pasillo de mi molesta conciencia. Sé que nunca lo volv
la botella a Rico. "¿Puedes ponerme
ios. "Estás jug
ojos está
ndo en un mosh pit en algún lugar desde lo más profundo. Después de un segundo, escucho que se aprieta la botella de protector solar y cierro los ojos. Es un protector solar a base de aceite. Mi corazón está latiendo mu
or del biquini y cierro los o
ontrae con aprecio. Sus dedos suben y bajan por mis hombros, y luego bajan por mis c
edo r
ontra mi trasero. Mi corazón cae libre de mi
lmate, repito una y
dios tiene sus manos sobre mí y estoy a pu
demasiad
manos exploran cada centíme
a vuelt
Eso sue
n oscuros y llenos de deseo. Vuelve a aplicar protector solar en su mano y se apoya en su codo
e esta manera por primera vez. Frota sus palmas sobre mi estómag
n no abrir las piernas como ca
as por dentro. "Estas curvas". Él sisea en señal de aprobación, y su mano se desliza debajo de
llega allí"
. "Así es, lo sien
que el aceite s
suficiente?
o todo el día". Su mano vuelve a caer s
na de la misma manera con todos los hombres. Nos encontramos, seguimos felizmente, pero cuando llega el momento, lo bloqueo y lo empujo. He tenido muchas oportunidades a lo largo de los años pa
pedido. Yo era sexualmente compatible con ambos, y me rompía el corazón que ninguno de ellos pudiera retenerme mentalmente. Amaba a ambos por diferentes razones, pero nunca me sentí completa, ni siquiera cuando estaba segura en sus brazos. Siempre ha fal
el divorcio de mis padres. No sé. F
... pero no pe
eso de mi cadera e inhala con fuerza. Puedo sentir
volver loco a un hombre co
co. Puede que solo sea otra muesca en su cama italiana, pero me aseguraré de que me recuerde. Voy
iempo desde que me
separan lentamente. Sé que se está imaginand
doce
por la idea. "¿Cómo diablos pasas s
ice mi nombre. Con su acento
liv
icultad", susurro mientras lo miro. Puedo
su mano se desliza debajo de la parte superior de mi bikini una vez más. Mi
uiero que lo
cesito llev
ez lo