PROLOGO
Alejo
No podemos enfrentar algunas cosas por si solos y lo tengo muy en claro que las porquerías en el pasado hice ahora me están cobrando una mala pasada, tengo también en claro que todas son mi culpa y de mi padre, aunque más de mi padre ya que el me trajo a este mundo lleno de maldades, ese hombre me enseñó a ser una mala persona.
Por culpa de él, tuve que hacer sacrificios para salir adelante, me alejé de mi familia, de la mujer que amé, me alejé de todos.
— Señor tiene que ver esto — dice con nervios, mi mano derecha Henry, me tiende el periódico comienzo a leer detalladamente la sección donde sale mi nombre. Maldigo y tiro en el basurero, miro a mi mano derecha.
Debemos salir del país, estoy buscando por todos lados, debo pensar en las opciones que tengo.
— Porque no pide ayuda a su hermano mayor, usted era amigo de su esposa ¿Lo recuerda? Él está dispuesto a ayudarlo — sugiere, niego con la cabeza en silencio.
No quiero meter a mis hermanos en mis mierdas.
— Salí de ese lugar para que no me encuentren y causen problemas a ellos, Henry. León tendrá a su familia y Mijaíl ya tiene una. No quiero que sus hijos se vean involucrado en nada, no debo interferir ni tampoco que les causen problemas por mi culpa. Debo buscar otro método — comento y creo que él tiene razón porque asiente con la cabeza.
— Tenemos que salir e irnos a un lugar donde nadie nos conozca o encuentre. Henry busca un lugar, una ciudad pequeña — ordeno y asiente varias veces saliendo del despacho.
¿Dónde podemos irnos? Nos iremos en la madrugada en esa hora es donde todo el mundo se duerme.
En la noche...
Escucho las sirenas de las policías afuera de la casa.
Nunca pensé que me encontrarían con rapidez.
Me levanto de la cama, me pongo una remera, saco mi mochila de emergencia y salgo de la habitación. Mi mano derecha viene junto a mí y lo miro.
— Hay que salir de aquí comienza a correr — ordeno y solo se limita a asentir, corremos hasta nuestro escondite, allí están nuestras armas.
— Tenemos que ir hasta el garaje ¿Cómo haremos eso sin que se den cuenta? — pregunta, escuchamos que la puerta principal es tirada y nos miramos los dos cuando escuchamos los gritos de los policías. Hago una seña a Henry para que mantenga la boca cerrada, pudimos llegar por pura suerte al garaje.