Locura Insensata

La misteriosa esposa que me robó el corazón

Wayward Son

Dayna había adorado a su esposo, pero le robó la herencia de su difunta madre y la dio otra mujer. Tras tres años de miseria, él la descartó, dejándola hecha pedazos... hasta que Kristopher, el hombre al que una vez traicionó, la rescató de las ruinas. Ahora, él estaba en una silla de ruedas, con una mirada fría como hielo. Ella le propuso un trato: sanaría sus piernas si él la ayudaba a destruir a su ex. Él se rio y aceptó. Mientras su alianza se consolidaba, él descubrió sus otras identidades: doctora, hacker, pianista... y su corazón muerto comenzó a latir de nuevo. Pero el ex de la mujer, arrastrándose como un perro, regresó: "Dayna, ¡eres mi esposa! ¿Cómo te atreves a casarte con otro? ¡Vuelve conmigo!".

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Esa mañana, Prompto se encontraba entrenando arduamente con Gladio en el gimnasio de palacio, cuando vieron a Cor y un par de soldados Kingsglaive pasar con rapidez frente a su puerta.

Gladio se detuvo en seco y le dirigió una mirada al rubio;

- ¿sabes que está pasando? – preguntó el mayor bajando los puños y poniendo una posición más relajada

-no lo sé. - negó el chico con la cabeza y relajándose también -Desde ayer andan muy inquietos… supongo que debe ser algo con el Imperio. – suspiró -Además, debe ser algo importante… los Kingsglaive se están moviendo

-iré a ver a Iggy, él debe saber algo

- ¿terminamos entonces?

-si. - contestó Gladio cuando Prompto dio un salto de alegría -Ve a ducharte y puedes irte

- ¡yea! - soltó el rubio y corrió a las duchas mientras que Gladio se marchó en busca de Ignis a su despacho.

El escudo caminó a paso rápido por los pasillos del palacio.

Cuando por fin llegó al despacho del estratega, tocó a la puerta y espero respuesta.

Al no obtenerla, tocó nuevamente, hasta que la puerta se abrió y por ella salió Cor con cara de pocos amigos;

-Gladiolus- dijo el hombre con voz ronca

-Cor… ¿Ha pasado algo? - preguntó el otro con preocupación -Has estado muy ajetreado estos días

- ¿Dónde está Prompto? - preguntó el otro ignorando lo anterior

-en las duchas. Debería estarse yendo en unos minutos

-debo alcanzarlo. Nos vemos- dijo el Marshall al alejarse a paso rápido mientras que Gladio entró en el despacho de Ignis.

-Gladio- dijo el de lentes mientras que el mayor cerraba la puerta - ¿En qué puedo ayudarte?

- ¿Iggy que demonios está pasando? - preguntó el otro confundido

-lo lamento, pero no entiendo tu pregunta

-no juegues conmigo… ¿el Imperio está preparando algo? - Ignis suspiró y se acomodó sus gafas un momento

-no se los detalles. - comenzó a decir con una voz muy diferente a la suya, pero igual de calmada -Lo único que puedo decirte es que debemos proteger muy bien a Noctis y a Prompto… o al menos eso me pidió el señor Leonis

- ¿Cor? - cuestionó Gladio -Bueno, es normal supongo

-debe serlo- concluyó Ignis volviendo a subirse sus gafas, pero esta vez lo hizo manteniendo un aura más oscura.

Por otro lado, Prompto iba saliendo de las duchas con su teléfono en la mano mientras que le enviaba mensajes a Noctis;

Prompto (12:02): ¡Hey dude! ¿Dónde estás? Acabo de salir del entrenamiento con Gladio y me preguntaba si te gustaría ir al Arcade conmigo

Prompto (12:05): ¿cita de juegos y batidos? (emoji Chocobo) (emoji batido) (emoji carito sonriente)

Noctis (12:10): ¡claro amigo! Nos vemos en la entrada del Arcade a las 2:00 pm

Noctis (12:13): tengo cita de estudio con Iggy hoy (emoji carito durmiendo) (emoji libro) (emoji pistola)

Prompto (12:16): suerte, amigo. Nos vemos.

El chico continúo caminando, hasta que topó de frente con Cor, quien corría velozmente hacia él;

-hola- saludó con la mano cuando el hombre llego frente al menor

-me alegra que no te hayas ido. - comenzó a decir Cor -Te llevaré a casa

- ¿estás seguro? Hoy están trabajando mucho