Elvira, una joven soñadora enclaustrada en una jaula de oro, vivía bajo el yugo posesivo de Adrián, su tutor y protector, quien, sin saberlo, era el dueño de sus pensamientos más prohibidos, el amor de su vida.
Cuando un programa de estudios en el extranjero le ofreció la promesa de libertad, Elvira descubrió una verdad devastadora: estaba embarazada, y el bebé era de Adrián.
El corazón se le hizo pedazos al presenciar a Adrián con otra mujer, Valeria, compartiendo intimidades que a ella le fueron negadas, confirmando que nunca fue más que "su hermanita".