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La revolución de una nueva era

La revolución de una nueva era

Josel Rojas

5.0
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Capítulo

Una vida apacible y deseado por muchos pareciera haber en San Nikolas, un valle ubicado en Tokio. Para cambiar todo, el albur o más bien destino se encarga de enviar a un bebé visionario a este lugar. El elegido no es más que Jenky Danko, que comienza siendo un bebé secreto. Para luego pasar a ser un joven intrépido, que trata de hacer frente a las inclemencias de la naturaleza y desde ya lleva una vida arriesgada Por tratar de ayudar a unos indefensos casi siempre se ve envuelto en problemas y desde ya su libertad cae en manos de las autoridades. A través de una serie de preparaciones más físicas que mentales que lleva junto a su amigo “ Edison Encarnado”, su vida cambia por completo. Desde otra dimensión ven el futuro del mundo. Es allí donde se plantean interrogantes como estas: • ¿Ante tanto sufrimiento, desgracias y cosas negativas que pasan, es posible seguir creyendo en una deidad implantada por la religión o es mejor creer que todo pasa por causalidad? • ¿ El mundo se divide entre buenos y malos o más bien es mejor verlo dividido entre dos estatus social: que son los pobres y los ricos? • ¿ Ante el avance inconmensurable de la tecnología, esas dos clases sociales, seguirán desproporcionadas económicamente y socialmente? • ¿ Ante tanta mala elección a políticos populistas en Norteamérica, Latinoamérica y Asia llegará el la hecatombe antes de tiempo? A raíz de estas incógnitas y a través de una narración trepidante y repleta de personajes memorables, esta novela se convierte en una luz viva de las verdades no antes contadas.

Capítulo 1 1. Nacimiento de bebé secreto

Cada doce años, las familias de una colonia norteamericana que Residen en Tokio esperan el nacimiento del próximo bebé que pueda servirles mucho. Los llaman bebés genios, con superpoderes o futuristas.

Los últimos cuatro bebés que esperaban su llegada con mucho esmero, no lograron sobrevivir. Algunos indican con cierto temor que los hombres de ciencia no les dejaron que vivieran. De ser así o no, el asunto es que hoy nacerá otro bebé de ardua espera.

Como si fuera poco, muchos curiosos de han arremolinado por acá. Las chicas gestante está por ahí haciendo unos visajes de una gran muestra de dolor. Se encuentra acompañada de su esposo. La mayoría saben que no son de esta ciudad. Boston es el lugar de donde proceden. Al igual que en su ciudad oriunda, viven en un valle. Para no sentirse tan lejanos de su lugar, no les vino mejor idea que ubicarse y quedarse a vivir en estos Valles.

Por ser un día especial muchos doctores y enfermeras se han hecho presente desde luego. Te han preguntado cómo reconocerían a los bebés que esperan arduamente. Pues casi todos cuando nacen tienen un gran parecido. Las características están, aquellas criaturas presentan una piel demasiada rojiza, sus ojos no logran abrirse hasta cierto tiempo. Los dedos de sus pies lo tienen uniforme y no lanzan ningún plañir cuando nacen.

El color de sus cabellos merecen una nota especial, pues son algo así de un naranja esclarecido. Desde luego se puede decir que no son pelirrojos. Muy aparte de eso, hay otras características especiales en su carácter, por el cual se les puede reconocer. No obstante, para ello se debe esperar una cierta cantidad de días. No crean que todo son características físicas.

Con la verdad de las cosas la vida puede resultar altamente Misteriosa y hoy muchos hemos acudido a ver qué sucede por acá. Los doctores han llevado a aquella chica que está por dar a luz. No han permitido que su parto se vea en medio de esta gente reunida como todas las anteriores mujeres. A pesar que es una costumbre esto, que la privacidad y comodidad de la gestante es más importante que cualquier tradición.

La prensa internacional hace mucho eco de esto. Necesariamente debemos esperar que aquel bebé venga con rasgos extraños. Lo normal ya aburre. Algunos creen que este ser crecerá rápido y no disfrutará de las primeras etapas de su vida. Daría mucha pena verlo con algun trastorno mental cuando se desarrolle. Muchos no saben o no se percatan de mi presencia. Así es mejor pues vislumbro cosas y me doy cuenta de todo. Quizás años más tarde se entrarán de mi presencia. Estar acá , me hace sentir que vivo para contar la vida secreta de este misterioso ser.

A una hora de tanto preguntar y razonar me doy por enterado que este bebé nació bien y en ese aspecto los médicos están satisfechos con sus trabajos. Pasado un rato han traído a este presunto ínclito bebé para mostrarlo a la colonia. Los que esperaban que tenían cabello rubio o negro café fueron decepcionados.

Los ojos son un misterio. Sobre todo cuando observamos que los tienen de color naranja. A casi nadie se le ha visto en ese color de iris. Algunos se sienten medrosos. Su carácter merece un capítulo completo. Necesito dejarlo ahí. Espero que todo cambie. Da la sensación que va a vivir como un ser normal. Eso parece extrañar a los que conocen los misterios o están familiarizados con ello.

Tal vez debo pasar al momento cuando apareció la madre y armó una escena.

En primera instancia los doctores le habían prohibido salir. No obstante, ahí llegó aquella joven madre.

Comenzó diciendo algo con la pérdida de su hijo. Pasó rápidamente a buscarlo por cada rincón. Cómo no preguntó, no le dijeron dónde estaba su pequeño bebé. Mirándolo con detenimiento bella era la madre.

El padre llegó por ahí, miró a todos y se concentró más a menudo en unas autoridades de lugar. Ciertamente que esto no ocurriría jamás en Boston. Ese carisma especial le ayudó a que encuentre rápidamente al bebé visionario.

Lo encontró en medio de unos hombres de ciencia. Dieron a entender que venían desde Pekín para presenciar la llegada de este misterioso ser. Al igual que el bebé, ellos también guardaban secretos.

No obstante, era poco probable que le sacasen una investigación válida, por ello los medios de comunicación no pensaron siquiera en entrevistarlos. Tras un intervalo moderado de tiempo, dejaron la concentración y fueron a hacer otras cosas.

En sus saberes, creyeron que estaban perdiendo el tiempo conseguir esperando. Años más tarde seguramente el destino les castigaría dejándoles ansiosos. Pues no tendrán material para informar con certeza y sobre todo dar detalles de este magno acontecimiento.

Con los poco que quedaban, aquel bebé comenzó a señalar un objeto. En sí se trataba de una caja de hierro que poco se habían percatado. Estaba ceñido a un muro. Como estaba empolvado no llamaba la atención a nadie. Esos ojos naranjas esclarecidos no perdían de vista ese objeto.

Presentaba una visión periférica. Ver a esos hermosos ojos dirigidos a un solo lugar le causaba extrañeza a más de uno. Siempre amarían esos bellos ojos. No querer a unos ojos que no se ven siempre sino cada cien años. Tenerlo siempre en nuestras vidas era el ardiente anhelo.

A veces apreciar a una parte bella del cuerpo de alguien, calma sentimientos. La vida habríase hecho para admirar y no odiar. Este bebé seguía ahí con ganas de darnos a entender muchas cosas.

Se sabe aún que contendrá esa caja empolvada. ¿Será que ahí se guardan muchos secretos?, ¿ está ahí la información relevante que quiere este bebé?, ¿ que ayuden a este bebé a explorar la ciudad y el mundo?, ¿ será que ahí está los datos y señales de la historia de vida de este bebé?.

Para no causar más sospechas este bebé se ha centrado en mirar a algunas aves que están revoloteando por ahí. Dios de felicidad emanan también con el colorido de sus plumajes. Quizás años más tarde se podrá saber qué contiene esa caja empolvada y olvidada.

Los que no han tenido una incuria en sus investigaciones son los hombres de ciencia. Quieren cerciorarse que este bebé sea el que tanto han estado esperando.

Con una argucia llevado a cabo tan solo por ellos, han logrado obtener un cabello del bebé. Con eso tienen mucho y ya se han puesto manos a la obra. Esperan tener resultados lo más pronto posible. Con ese laboratorios con implementos tecnológicos muy avanzados, pienso que lo tendrán antes de tiempo. Mientras tanto tratarán conforme pasan los días de acercarse a este bebé

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