Capitulo 1 Esto debe terminar. Hoy se cumplían 11 años de matrimonio, su marido no llegaba tampoco la había llamado ni felicitado por su aniversario, tenía preparada una cena maravillosa, todo olía delicioso y ella lucia realmente hermosa y sexy capaz de enloquecer a cualquiera, a pesar de tener dos hijos tenía un cuerpo privilegiado, era delgada cabello largo negro hasta la cintura y un hermoso flequillo, sus ojos eran grandes y marrones y tenía una pestañas realmente bellas, muy largas y abundantes lo que hacía qué sus ojos fueran aun más hermoso su sonrisa se reflejaba en ellos, realmente sus ojos mostraban cada emoción. Ahora sus ojos estaban tristes esperando al menos algún detalle de su esposo pero jamás llegaban. - se escucha ruido en la entrada de la casa ella se paro rápidamente dio una ojeada a la mesa para ver que estaba todo perfecto se acomodo el hermoso vestido negro que se había puesto era un vestido negro le llegaba hasta los muslos y dejaba ver sus largas piernas y su gran trasero y sus pechos qué era pequeños pero muy redondos se asomaban de su escote tenía la espalda descubierta y colgaba una hermosa cadena que se posaba en su espalda. Su esposo al abrir la puerta la mira de pies a cabeza y pregunta fríamente - Estamos celebrando algo?- Y que mierda haces así vestida? -Hoy es nuestro aniversario ¿lo olvidaste de nuevo? - dijo ella con un todo de voz a punto de romper en llanto trago saliva fuertemente solo para evitar que las lágrimas Corrieran por su rostro - No me digas, y que ahora vas a recriminar algo, como siempre te harás la víctima, te digo desde ya qué tuve un pésimo día y no estoy para tus espectaculos- dijo de forma burlona sentándose a la mesa. -Bueno Claudia por favor quita ese rostro y sirveme algo de comer qué muero de hambre o tendré que esperarte toda la noche. Agachó la mirada y se dirigió a la cocina para ir a buscar una bandeja con dos platos qué realmente daba pena comer todo estaba bien ordenado y decorado se veia realmente rico, puso el plato en el lugar donde se sentó Alejandro le sirvió una copa de vino y subio a su habitación, al ni siquiera le importo qué ella no comiera con el, se quito el vestido se quito el suave
Capitulo 1 Esto debe terminar
Hoy se cumplían 11 años de matrimonio, su marido no llegaba tampoco la había llamado ni felicitado por su aniversario, tenía preparada una cena maravillosa, todo olía delicioso y ella lucia realmente hermosa y sexy capaz de enloquecer a cualquiera, a pesar de tener dos hijos tenía un cuerpo privilegiado, era delgada cabello largo negro hasta la cintura y un hermoso flequillo, sus ojos eran grandes y marrones y tenía una pestañas realmente bellas, muy largas y abundantes lo que hacía qué sus ojos fueran aun más hermoso su sonrisa se reflejaba en ellos, realmente sus ojos mostraban cada emoción.
Ahora sus ojos estaban tristes esperando al menos algún detalle de su esposo pero jamás llegaban.
- se escucha ruido en la entrada de la casa ella se paro rápidamente dio una ojeada a la mesa para ver que estaba todo perfecto se acomodo el hermoso vestido negro que se había puesto era un vestido negro le llegaba hasta los muslos y dejaba ver sus largas piernas y su gran trasero y sus pechos qué eran pequeños pero muy redondos se asomaban de su escote tenía la espalda descubierta y colgaba una hermosa cadena que se posaba en su espalda.
Su esposo al abrir la puerta la mira de pies a cabeza y pregunta fríamente - Estamos celebrando algo?- Y que mierda haces así vestida?
-Hoy es nuestro aniversario ¿lo olvidaste de nuevo? - dijo ella con un todo de voz a punto de romper en llanto trago saliva fuertemente solo para evitar que las lágrimas Corrieran por su rostro - No me digas, y que? ahora vas a recriminar algo, como siempre te harás la víctima, te digo desde ya qué tuve un pésimo día y no estoy para tus espectaculos- dijo de forma burlona sentándose a la mesa.
-Bueno Claudia por favor quita ese rostro y sirveme algo de comer qué muero de hambre o tendré que esperarte toda la noche.
Agachó la mirada y se dirigió a la cocina para ir a buscar una bandeja con dos platos qué realmente daba pena comer todo estaba bien ordenado y decorado se veia realmente rico, puso el plato en el lugar donde se sentó Alejandro le sirvió una copa de vino y subio a su habitación, al ni siquiera le importo qué ella no comiera con el, se quito el vestido se quito el suave maquillaje qué traía y se puso su pijama, un short corto de satin y una camisa sin mangas solo un par de tiras y se sentó en la cama a leer un libro, cuando escucha pasos que se dirigían hacia la habitación.
Alejandro entra por la puerta y le lanza una gélida mirada, - ya termine de comer si quieres puedes bajar a lavar los platos- dijo con voz de mando
Ella lo miro y rápidamente se puso de pie en dirección a la puerta, pero es frenada por Alejandro la toma del brazo y le dice -te tomaste la molestia de prepar toda esta mierda y ahora te haces la enojada, cuando subas quiero que me des mi regalo- la nalegea y se gira en dirección al baño donde empieza a desvestirse.
Claudia tenía algo atorado en la garganta, desde hace años que su esposo había cambiado con ella cuando empezó su relación el era un hombre atento, cariñoso y siempre tenía sencillos pero hermosos detalles que ella siempre atesoro con mucho amor, pero al nacer el primero de sus hijos el cambio dejo de decirle lo hermosa que se veía, al contrario la hacía sentir mal por no quedar en la misma condición física qué tenía se volvió frío con ella y además que pasaba el tiempo en apps de citas para conocer a otras mujeres y si ella reclamaba el cruelmente la comparaba diciendo que sus ojos merecían ver mujeres hermosas de ensueño y no la pesadilla qué tenía enfrente una mujer desaliñada y flácida, pero ella después de un tiempo dejo de recriminar, al nacer su segundo hijo todo fue peor su esposo dejo de tocarla y la miraba con despreció.
Ella no dejaba de pensar en todo lo que tuvo que callar para no ser humillada por Alejandro y tomo una decisión.
Entro en el baño se miro en el espejo, al ver su reflejo y la armargura qué proyectaba su rostro
Y desicida camino hacia la habitación, se quedó parada mirando la puerta y con la mano en la manija dispuesta a entrar, dio un fuerte suspiro y abrió la puerta.
-por que eres tan lenta para todo?- dijo Alejandro frunciendo el ceño.
Ella lo mira fijamente y sin alcanzar a decir algo Alejandro se pone de pie y la jala hasta la cama de un tirón - Ven y dame mi regalo o no era eso lo que querías, te arreglaste y preraste una cena tan elaborada- dijo Alejandro metiendo sus manos entre su camisa el rose de su manos en sus pechos la hizo olvidar por un momento lo que quería comunicarle, por que ella aun lo amaba y lo deseaba el siempre era excelente en la cama pero fuera de ella era una mierda.
Ella sabía que no era suficiente para seguir soportandolo, - qué rico hueles ven siéntate aca-
Alejandro la lleva a sentarse en su pelvis donde preciona sus caderas, ella siente su dura polla justo entre sus piernas, el quita su camisa y se lleva ambos pechos a la boca y no dejaba se lamerlos, pasaba su lengua fuerte y lento por sus pesones saboreaba el sabor de su esposa, ella le tocoba el cabello ya qué para ella esta sería la última vez que tenia sexo con el para ella era una despedida, lo tomo
por los hombros y lo empuja suavemente hacia atrás, se arrodilla, baja su pantalón de pijama y ve su polla dura y enorme frente a ella y sin pensarlo la llevo a su boca, subía y bajaba lentamente y succionaba muy despacio también pasaba su lengua de arriba abajo hasta los testículos, el gemia y desia- olvidaba lo buena que eres en esto-Oh Dios- qué rico lo haces, ven aca- le dice jalandola de los brazos para que se levante y vuelve a llevar a su esposa a su pelvis y introduce su polla fuerte en su coño y la toma del culo, ella empieza a hacer movientos circulares y pequeños saltos, el explotaba de placer ya qué hace mucho no cogia asi a su esposa, de pronto ella empezó a mover más rápido su cadera y el apretaba más fuerte su redondo culo hasta que ambos gimieron de placer juntos llegaron al orgasmo, ella se levanta rápidamente al baño el se queda recostado en la cama recuperando el aliento mientras pensaba como pudo aguantar tanto sin cojer así su esposa ella era hermosa y como lo tocaba y lo hacía acabar, millones de recuerdos se apoderaron de su mente entre ellos llego el recuerdo de su secretaria Carolina a quien se cogia hace más de un año y también recordó el día que su esposa lo descubrió y el le dio una bofetada por reclamarle se formó un nudo en su garganta, en eso sale claudia del baño da un fuerte suspiro y lo mira fijamente, el levanta la cabeza para mirarla y ella sin pensarlo le dice- quiero el divorcio ya tome una decisión y no hay nada que puedas decir para cambiarla- el abrió sus ojos como platos de la sorpresa - queee? Estas loca acabamos de hacer el amor-dice Alejandro sin poder creer lo que claudia acababa de decirle - para mi fue una despedida me canse de ser invisible, tu falta de detalles y de respeto cada vez que te digo lo que me molesta, me canse de que te folles a tu secretaria y tener que hacer como que no pasa nada de callar por mantener una familia unida para mis hijos pensé que hoy podíamos pasar una hermosa velada pero ni siquiera te importa- Dice claudia mientras trataba de no llorar.
Y tu crees que te daré el divorcio, ja ja ja por favor no me hagas reír ¿qué vas hacer sin mi? ¿De que vivirás si el que mantiene esta casa soy yo? Dejate de estupideces y ven a dormir qué mañana tengo que salir temprano y tu tienes que prepar el desayuno-dice Alejandro mientras se subía los pantalones y se metía a la cama, Claudia se sentía tan frustrada con las palabras de su esposo pero en su mente sabía que era una desicion tomada y que en la mañana empezaría un nuevo día y podría pensar bien que hacer sabía que su esposo no se iría de la casa y si quería divorciarse la qué debía irse era ella y obviamente con sus dos pequeños no los dejaría con Alejandro que aun que sabia que era un buen padre ella creía que sus hijos debían estar con ella no existía otra opción, se metió en la cama dándole la Espalda a Alejandro el se acercó solo para susurrarle en el oído, - espero no sea enserio lo que dijiste tu eres mía y jamás te podrás ir de mi lado, hasta que la muerte nos separe querida no lo olvides.
A la mañana siguiente y después de que Alejandro se fuera al trabajo y ella llevara a los niños a la escuela, de inmediato corrió a tomar un taxi en dirección a un dpto. En alquiler qué había visto en Internet, estaba en centro de la ciudad estaba en un edifico qué por fuera se veía viejo y descuidado, no era mucho de su agrado ya qué su casa matrimonial estaba en un barrio residencial era amplia y hermosa tenía 6 habitaciones y 3 baños además de un jardín precioso en la entrada y en el. Patio una hermosa terraza con piscina pero sabía que para alejarse de su esposo debía empezar de 0 y hacer todo por si misma.
Al entrar al apartamento lo primero que vio era lo pequeño que era tenía dos habitaciones un baño y una cocina americana muy pequeña, no era para nada lo que ella buscaba pero era lo que estaba a su alcance hasta que pudiera encontrar trabajo ella era pastelera pero desde el nacimiento de su primer hijo solo se dedicaba a ser dueña de casa ya que Alejandro la quería cuidando de su hijo
En tiempo completo y luego del nacimiento del más pequeño para ella era casi imposible retomar su carrera y el sueño de tener una pastelería se fue postergando año tras año, sus hijos y no eran bebes y podían entender si ell quería trabajar, el mayor tenía 10años y su hermano menor 8 años ambos iban a una escuela privada pagada por Alejandro además que tenían bastantes actividades extracurriculares después de clases ambos hacían natación, iban a clases de piano y tenían fútbol después de clases, por lo que le daba tiempo para poder trabajar son descuidarlos tenía tantas ideas en su mente que no podía dejar de pensar en cómo lo haría para salir de casa con sus hijos sin que Alejandro la detuviera.
Al salir del edifico llena de esperanzas y de ilusiones no podía creer que ya había cerrado el trato con la dueña del apartamento, pago 3 mensualidades por adelantado ya qué ella aun guardaba un pequeño monto que su mamá al Morir le heredó, ella sabía que ese dinero era de ella y Alejandro no podía hacer nada sobre el por eso lo guardo durante años, Alejandro pensaba que se lo había gastado hace mucho tiempo en ropa y tonterías, pero no, Claudia no podía creer que hoy ese dinero le abriría la puerta a la libertad, emocionada se fue a su casa matrimonial armo un par de maletas para sus hijos una pequeño bolso para ella, ordenó muy bien los documentos del nuevo apartamento en una mochila junto a las joyas qué le dejo su mamá y una pequeña caja con dinero que tenia guardado entre su ropa casa vez que Alejandro le daba dinero para cosas de la casa ella guardaba un poco justamente para estos casos no era mucho pero eran casi 500 dolares que al menos le ayudarían a vivir un tiempo o para invertir en insumos para empezar a trabajar, claudia no dejaba de pensar en las posibilidades que tendría a partir de este día.