Vitorravenna1223
Libros de Vitorravenna1223(2)
Casada con un montruo
Romance - Yo... no lo tengo... no podemos pagar la deuda. Por eso he venido aquí. - Mis sollozos salieron sin forma.
Jamie dejó escapar un sonido de indignación. Ahora, mirándole a los ojos, no parecía nada contento.
- Hay una manera. - Todo su cuerpo se puso rígido y la sonrisa de sus labios vaciló. - Pero tú ya lo sabes, o en el fondo no estarías aquí.
La ansiedad me aprieta la garganta, robándome cualquier excusa que pueda dar. Y eso es porque, sencillamente, no hay ninguna.
Jamie me observa un momento más, analizando mi rostro como si fuera a revelarle algo que quiere confirmar, como si buscara alguna verdad.
- Llévame lejos. - le ruego. - Llévame lejos y deja en paz a mi familia.
Alarga la mano y me agarra la mejilla, frotando la punta áspera y callosa de su pulgar con una ternura enfermiza.
- Es una mala idea. - advierte, estudiando mi rostro. Entonces la comisura de su boca se curva. - Un buen hombre rechazaría esa posibilidad. - Hay chispas de ira en sus ojos. - Pero yo no soy un buen hombre, y no me iré de esta ciudad sin mi recompensa. Mi pago.
El pavor se me hundió en el estómago al oír sus palabras.
Yo sería el pago por una duda, un maldito pago.
- Pero, ¿qué me harás?
Mi pecho bombea erráticamente a medida que el miedo se hace más potente.
- No te preocupes. - Se aleja un poco, cogiendo de nuevo su whisky. - No quiero nada más que una esposa. - dice alegremente, como si fuera la primera vez que le miro. Embarazada del bebé que no era del Director General
Romance - Estoy embarazada", le digo con voz temblorosa.
Su mirada pasa por encima de mí como si fuera un trozo de basura.
Me quita el sobre de la mano y se queda mirándolo unos instantes.
- ¿Y qué coño prueba eso? - dijo con sarcasmo. - Este bebé podría ser de cualquiera. - Me tiró el sobre.
- ¿Tú qué crees? ¿Tú qué crees? Te he dado mi virginidad, idiota. - Alcé la voz, cansada de que me humillaran. - Te di mi primer beso. - espeté, con la voz enronquecida por la rabia, pero sin poder evitar que se me saltaran las lágrimas.
- No recuerdo que te comportaras como una virgen -dijo con una sonrisa malévola-. - Y además, ¿a dónde crees que te llevará esta situación? ¿Con qué propósito has venido aquí? 'Creo que recuerdas bien que tengo una prometida y compromisos futuros que no implican ser padre de un bebé que tal vez ni siquiera sea mío.
Se inclina hacia mí, tan cerca que puedo oler las notas especiadas de su colonia. Entonces, una sonrisa sensual se dibuja en sus labios.
- "Y para colmo, quieres hacerme creer que tú, una pobre niña rica, eras inocente", hace una pausa dramática y sonríe como si acabara de contar un chiste muy gracioso. No parecías virgen cuando te follé.
Me trago el enorme nudo que tengo en la garganta y me paso la mano por la cara para secarme las lágrimas.
- Si lo hubiera sabido...". - Me trago las lágrimas que se forman, sin dejar que vuelvan a caer por él. - Si hubiera sabido quién eras en realidad, nunca me habría acostado contigo. Nunca habría ido a esa fiesta. Sólo he venido a decirte que estoy embarazada y que el bebé es tuyo. Le puede gustar
Los Mellizos del CEO
Hanaby Paola Fischer vive un matrimonio aparentemente feliz hasta el día en que, al regresar a casa, encuentra a su esposo, Lucas Hotman, en la cama con su secretaria, Rose Evans. La traición la deja destrozada, y, sin saber cómo enfrentar el dolor, se marcha de su hogar. Esa noche, en un bar, conoce a un enigmático desconocido que le ofrece una compañía inesperada. Buscando escapar de su desilusión, Paola se entrega a una noche de pasión con él, dejando que el dolor de su traición se diluya en la intimidad.
Al día siguiente, trata de seguir adelante, pero pronto se enfrenta a una sorpresa que cambia el curso de su vida: está embarazada, y el padre no es Lucas, sino aquel hombre al que apenas conoció. El Príncipe Azul Soñado
PR "Durante su trabajo de medio tiempo en un bar clandestino, Wendy se emborrachó accidentalmente. Cuando se despertó, se dio cuenta de que la habían confundido con una prostituta y que había perdido su virginidad. Después de tener una aventura de una noche con Charlie, un hombre increíblemente guapo, Wendy tiró doscientos dólares para defender su dignidad. Sin embargo, el comportamiento arrogante de Wendy molestó a Charlie, quien, en venganza, volvió a llevarla a la cama.
""¿Qué quieres?"", dijo Wendy molesta.
""Asumir la responsabilidad de lo que te hice"", respondió Charlie sonriente.
""¿Pero cómo?"", Wendy continuó.
""Al seguir acostándome contigo""." RIVALIDAD
mhgeraldinehernandez
La rivalidad que existe entre tú y Miguel viene de la secundaria, peleando siempre por demostrar quién es el mejor en todo, siempre fueron vecinos y ahora serán concuñados, el destino se empeña en unirlos ¿Cómo no lo ves?, tienen personalidades parecidas, son exitosos en sus campos, sus padres se llevan bien...
¡Melissa, ya deja de decir estupideces!, ese imbécil no me interesa ni lo me interesará nunca, además que no sabes que tiene novia, jamás haría pasar a otra mujer por lo mismo que yo pasé, sé lo que duele que te engañen y aún si fuera soltero él no es mi tipo y siempre seremos rivales y nunca nos caeremos bien, así seamos familia.
¿Por qué lo odias tanto?
¡No lo odio! Él a mi sí, pero no es de mi agrado nunca lo ha sido y nunca lo será ¿Por qué no lo entiendes?, eres un psicóloga exitosa...Deberías entender que hay personas que simplemente no se la llevan...
Melissa: Solo te digo una cosa, en ocasiones...DE LA RIVALIDAD TAMBIEN NACE EL AMOR.
Tú amor Duele
Monik.A.B Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos.
Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman.
Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte.
Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades.
Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0
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Secretaria ¿Te quieres acostar conmigo?
Miri Baustian Para Alejandro, un Ceo poderoso, millonario, atractivo, mujeriego y caprichoso, fue una sorpresa que su nueva secretaria se negase a acostarse con él, cuando todas caían a sus pies.
Tal vez por eso ninguna le duraba más de dos semanas, es que se cansaba rápidamente de ellas, sin embargo, Valeria se negó, provocando que él la persiguiera pensando distintas estrategias para lograr su cometido, eso sin dejar de lado su diversión con las demás mujeres.
Sin darse cuenta, Valeria se convirtió en su mano derecha y él la necesitaba hasta para respirar, no obstante no reconoció su amor hasta que ella llegó a su límite y partió.