Katherine Petrova
Libros de Katherine Petrova(8)
Durmiendo con el enemigo
Adulto Joven Vanessa estaba de pie junto a la ventana, la luna iluminando su silueta. Llevaba un camisón de seda negra y el cabello suelto. En sus manos, sostenía una pistola plateada. Una sonrisa se curvaba en sus labios. No era dulce. No era tranquila. Era una sonrisa de victoria. Diabólica.
-Dormir con el enemigo no es tan desagradable como dicen, ¿verdad? -dijo ella con voz lánguida.
Damian no respondió. Solo la miró. La vio de verdad por primera vez. Esa mujer a la que pensó moldear, proteger, encerrar... no era una flor frágil. Era un veneno con aroma de gardenia.
-¿Fue tu plan desde el principio?
Vanessa ladeó la cabeza.
-No desde el principio. Pero cuando me diste motivos, cuando me hiciste invisible, cuando decidiste que eras mi dueño... Ahí empezó todo.
Damian se dejó caer en una silla, derrotado más por la verdad que por el cansancio.
-¿Esto es por Henry? - señalo al hombre que estaba en una esquina -¿O es porque no te estoy dando la posición de jefe?
Ella sonrió.
-Se llama control y estoy recuperándolo.
-Usaste a Connor. Lo hiciste todo con una palabra. Una sola palabra, y desataste una jodida guerra. Ahora muchos hombres morirán.
Ella se acercó lentamente, como una sombra. Le puso la pistola en el regazo, sin dejar de sonreír.
-No, tú apretaste el gatillo y comenzaste todo. Yo solo hice lo que toda buena esposa hace, amor. Protegí mi futuro.
Damian alzó los ojos hacia ella, roto y rabioso, con una parte de él deseando besarla, y la otra, deseando estrangularla con sus propias manos.
Vanessa se inclinó y susurró junto a su oído:
-Bienvenido a mi mundo, esposo.
Y luego salió de la habitación, dejándolo solo con su culpa, su sangre... y el arma que, probablemente, terminaría usándose en esta guerra que ella misma había declarado. Tu dragón
Adulto Joven A lo lejos, en la oscuridad de la noche, la vio: una mujer cruzando la calle.
Su cabello, negro como la noche, ondeaba con el viento; su piel de porcelana resplandecía bajo la tenue luz, y llevaba una bata casi transparente que le llegaba hasta las rodillas, dejando entrever su ropa interior negra de encaje. Era como un ángel caído.
Ese ángel estaba siendo perseguido por varios hombres que, a simple vista, parecían ebrios. Sin pensarlo demasiado, Alexander frenó la moto de forma brusca, interponiéndose entre ellos y la mujer. Se quitó el casco y se puso de pie, firme.
-¿Qué está pasando aquí? -preguntó en voz alta.
Los hombres no retrocedieron; por el contrario, dieron un paso hacia adelante. Instintivamente, la mujer se colocó tras su espalda, aferrándose a él.
-No te metas, estamos hablando con la chica -gruñó uno de ellos.
-¿Ah, sí? Porque no me lo pareció -replicó Alexander, con frialdad.
-No seas entrometido, chico. No sabes nada -le reclamó otro, visiblemente alterado.
-Ella es nuestra. No entiendes nada -añadió el primero.
Sin más advertencias, Alexander sacó el arma que llevaba en la cintura, disparó un tiro al aire y luego apuntó directamente hacia ellos.
-Ella está conmigo. Retrocedan.
Juego de ambición
Urban romance -¿Cuánto tiempo? -escupe Katherine, con los ojos llenos de odio.
-No importa -susurra Alexander, con el rostro tenso.
-Por supuesto que importa -Lya se pone de pie, con el labio partido temblando, el corazón desbocado, sin importarle que está desnuda-. Porque estoy embarazada.
El silencio cae como un trueno en la habitación, haciendo que el aire se vuelva más pesado.
Alexander la mira fijamente, frunciendo el ceño, incapaz de creerlo.
Katherine jadea, como si le hubieran arrancado el aire de los pulmones.
-¿Qué acabas de decir? -murmura él con un tono frío.
Lya coloca una mano temblorosa sobre su vientre. Era ahora o nunca.
-Voy a tener un hijo tuyo... y es un niño.
Katherine se queda inmóvil. Ella y Alexander nunca habían podido concebir. Y ahora, la otra mujer, la amante, le había dado lo único que siempre había deseado.
-No... eso no es posible -susurra Katherine, negando la realidad, relajándose visiblemente en los brazos de su esposo.
Pero la verdad está justo frente a ella, y el veneno en su mirada se vuelve letal.
-Si crees que te dejaré quedártelo... estás equivocada -la voz de Katherine es letal-. No tendrás nada.
Lya mira a Alexander, buscando algo... cualquier cosa... pero él solo aparta la mirada.
-Vístete y lárgate -fue lo único que dijo. Desde que te vi...
Romance En un torbellino de pasión y traición, Sebastián Nash, un magnate arrogante pero irresistible, ve su vida perfecta colapsar cuando su affaire con la seductora Catalina sale a la luz, desencadenando una cadena de eventos que amenaza con destruirlo todo. Mientras Sebastián persigue su sueño de paternidad con Catalina, su esposa Karen, una mujer fuerte y decidida, se embarca en una misión para proteger su imperio familiar de las garras de la traición. Catalina, motivada por su oscuro pasado y su insaciable ambición, urde un plan maestro para asegurar su lugar en la alta sociedad, manipulando a Sebastián a su antojo. Pero en medio de la tormenta surge Josh, un apuesto abogado que ofrece a Karen un rayo de esperanza en medio del caos, desatando un torbellino de emociones prohibidas. Mafia
Adulto Joven Charlotte Rock acaba de cumplir sus 18 años, es una famosa corredora en carreras ilegales, tiene un expediente sellado con la policía y tuvo una relación, con el ahora líder del cártel del Pacífico, pero busca escapar de su pasado y reformarse de su vida criminal, ¿Podrá hacerlo? ¿Correrá lo suficientemente lejos o logrará caer ante la tentación?
Trevor Olivieri es un joven italiano, que creció como un orgulloso mafioso, lejos de su mundo de lujos y ostentosidades, su padre lo envía América a buscar una nueva alianza, pero unos impresionantes ojos verdes lo atrapan en un mar de problemas, ¿Sera ella la clave para resolver su misión o será ella quien ayude a clavar su tumba? Le puede gustar
PROTEGIDA POR EL DON
Atena S Carla Rossi jamás imaginó que una simple decisión cambiaría su vida para siempre. A sus 17 años, ha crecido en las sombras de la incertidumbre, sin un padre y con una madre que oculta secretos. Trabaja duro para sobrevivir, su única rebeldía es un cigarro a escondidas y su única familia es Jaquelin, su mejor amiga. Pero todo cambia la noche en que, buscando un momento de soledad, encuentra a un hombre herido en un callejón.
Ese hombre es Fabrizio Antonucci, el despiadado Don de la mafia italiana. Conocido por su brutalidad, temido por muchos, pero admirado por su poder, Fabrizio es un hombre al que nadie se atreve a desafiar. Sin embargo, Carla, con su inocencia y dulzura, despierta algo en él que ni siquiera comprende: un instinto de protección que no ha sentido por nadie desde la muerte de su madre.
Arrastrada a un mundo de lujos, peligro y deseo prohibido, Carla intenta resistirse a la atracción que la consume. Fabrizio la quiere cerca, la desea con una intensidad arrolladora, pero también sabe que su cercanía la pone en riesgo. La diferencia de edad, su inexperiencia y el abismo entre sus mundos deberían ser razones suficientes para alejarse... pero ni él ni ella pueden escapar de lo inevitable.
Entre amenazas, secretos familiares y un pasado que vuelve para destruirlos, Carla deberá decidir si huir de un amor que la aterra o rendirse al hombre que podría protegerla... o destruirla.
**Un romance oscuro, ardiente y peligroso, donde el amor no es un cuento de hadas, sino una batalla entre el miedo y el deseo.**
--- Distintos destinos.
lopez patricia Distintos destinos.
Sinopsis.
Patricia López.
Cuando menos lo esperamos la vida nos pone un desafío para probar nuestro coraje y valentía. El tiempo no mira atrás, dicen que el destino de cada persona ya está escrito y el mío al parecer tenía muchas fallas así que dependía de mí seguir escribiéndolo
y tal vez encontrar a alguien que me ayudara a terminarlo.
La vida al parecer estaba empeñada en ponerme muchos desafíos, uno cada vez más difícil que el otro, ¿se estaba pasando un poco? Mi vida quedó marcada por ese primer amor, ese bonito que nunca se olvida, el que desaparece, pero nunca se va.
Una vez más comprobé que el destino, la vida o no tengo idea de que era cruel conmigo. Estaba en el momento más feliz y de la nada todo se esfumó y no solo fue una vez, fueron varias.
Conocí la tristeza y las tinieblas, pero gracias a eso también conocí los mágicos colores y lo lindo que era ver una sonrisa a través de unos hermosos ojos. Pero, siempre había un, pero. Todo fue demasiado efímero y volvió a desaparecer.
Cuando yo estaba segura de tener todo bajo control apareció el destino y me puso de cabeza en una lucha interna entre el corazón y la razón, ¿a quién se supone que debía obedecer?
¿Qué pesa más la razón o el corazón?
Eso era lo que yo tenía que descubrir.