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La muñeca del rey mafioso

Capítulo 2 Caín Abel Escobar

Palabras:1670    |    Actualizado en: 26/03/2021

que a sus 27 años ya supera una fortuna

así me tachan mis más cercanos, pero así somos las personas, nacemo

con mis propios principios y

tido, porque cuando comprendí la vid

fiendo es mi propia vida y el dominio que adquirí de manos de mi Padre,

cesidad de mantener el poder y el control, sobre todo la av

será suficiente para esta organización. Y he aquí que siempre debo estar en una guerra constante, así mostrar mi fuerza y

ces en este trayecto pierdes la vida o

personal, pues odio ver a tanta juventud perdida

s es oscuro y las familias

odos nos llamamos la gran familia, pero cuando sabemos de alguna traición,

e soy el Jefe de esta misma O

probablemente salgas muerto, por que es un lugar donde no hay lu

rra, pero nunca vivo para permitirte ir a vivir tu supuesta nueva vida reg

co, y nisiquiera poder dar un paseo, como una si

ecursos monetarios debo segui

el brazo de la mano de hierro, porque nunca será suficiente, siempre tendrás que seguir ha

intenciones deben ser las mismas, cuando para mí ironía ni siquiera puedo disfrutar de lo ganado,

e cuidar las espaldas de todos, cuidarte de tus propios enemigos e incluso de tus amigos, o de los de tu círculo cer

pienso, ¿cual es el

de mi padre, mi abuelo y el padre de és

pios intereses, mi padre murió a la edad de 44 años, nunca supo a

unto, cual es el chiste de llevar una vida en la mafia, si yo

imple y ordinario, caminar por las call

do al menos de veinte a treinta h

ellos están pendientes de mi y d

orno nacer, eso la vida te la impone. Conozco muy

gen

concientes o inconcientes, "Oh mundo cruel" pero ¿es el mundo responsable de la crue

r, son las personas que la habitan los que

erso

ión, que es la que se encarga de los negocios nocturnos, de esas que al

a sangre correr, pero lo hago

hacen un punto débil a tu favor,

para mí me sirven para producirme placer corporal, luego

a y el

r no sirve, estoy muy bien así como

Viendo ese ejemplo, prefiero ser un hombre libre sin compromiso y follar mujeres sin faltar el respeto a alguna

ón de lo

pregunto si casi todos

a, me consta que esas personas que hablan del buen comporta

los actos bajos, pero son los que usan esos servicios las cua

amaría los principales consumidores de d

todo cuanto me dedico a producir es de

so por la ley, eso es lo que ellos anhelan tener, y no veo de dónde recae la doble moral, en el día con sus sacos

a la hora de juzgar, son los primeros en dar rienda suelta a s

o o a alguien, es porque lo tiene metido

depó

o, me sale a recibir m

a vida, es de esos hombres que nunca me

la res

miéndose carnita tierna. —Se refiere al viejo Emilio Casillas, un h

formación? —Miro unas carpetas con i

spu

ore como una Magdalena. —Dice en su h

de mi enemigo, solo logro ver la silueta de una mujer agachada

a todo este tiempo, no hay mujer que me gane, mejor dicho, me g

pto de mujer es, aunque digan, "eres un

esidad de esperar extrañar a una mujer en especial, pues ellas so

creo, y hasta ahora a mi me ha ido muy bien de esa manera, nada de complicarse la existencia de rel

Mafia, tener esposa, hijos, e

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1 Capítulo 1 Liona Davison2 Capítulo 2 Caín Abel Escobar3 Capítulo 3 Caín conoce a Liona Davison4 Capítulo 4 Claras intensiones de quererlo para él 5 Capítulo 5 Un escape sin éxito 6 Capítulo 6 Todo se suma para lo mismo, dos cuerpos no pueden ocupar el mismo espacio7 Capítulo 7 Todo en la vida tiene un inicio y también un final8 Capítulo 8 La captura de Emiliano Casillas 9 Capítulo 9 Razones de peso10 Capítulo 10 Lo que es, es y lo que no, ni aunque!11 Capítulo 11 Hacerla confesar12 Capítulo 12 Enojos y Celos... desde cuando 13 Capítulo 13 Más o menos14 Capítulo 14 Mentiras verdaderas15 Capítulo 15 Engaño para que se quede16 Capítulo 16 El orden de los factores no altera el producto17 Capítulo 17 Al amor desenfrenado se le compara con un caballo desbocado18 Capítulo 18 La muerte es el pan de cada 19 Capítulo 19 Una vida de altos y bajos20 Capítulo 20 Un hombre que sólo piensa en...21 Capítulo 21 Matar por tocar22 Capítulo 22 Apostar por la libertad ó por él...23 Capítulo 23 El escape 24 Capítulo 24 El escape II25 Capítulo 25 El escape III26 Capítulo 26 El escape IV27 Capítulo 27 Mi nueva vida 28 Capítulo 28 Lo que no lograron mis enemigos lo...29 Capítulo 29 Un día a la vez30 Capítulo 30 Vivir recordando para poder soportar31 Capítulo 31 Un hombre enamorado32 Capítulo 32 Empezar otra vez33 Capítulo 33 Un cúmulo de emociones 34 Capítulo 34 Estar más preocupado ahora35 Capítulo 35 Hayarte, cuidarte, es lo que quiero36 Capítulo 36 Tenerte conmigo hasta que envejezcamos37 Capítulo 37 Un mundo juntos38 Capítulo 38 Reunión 39 Capítulo 39 Amar 40 Capítulo 40 Un descubrimiento nuevo 41 Capítulo 41 Mi versión a las cosas42 Capítulo 42 Le permite ir tras sus metas43 Capítulo 43 Eres como miel a las moscas44 Capítulo 44 Debo ser un sádico45 Capítulo 45 Un ser misterioso46 Capítulo 46 Atrapados47 Capítulo 47 Intuición 48 Capítulo 48 Los arreglos de una boda 49 Capítulo 49 Una situación bastante bochornosa 50 Capítulo 50 Casi raptada 51 Capítulo 51 Soy yo52 Capítulo 52 Aprender a lo macho todo rápido y furioso53 Capítulo 53 Aparecen los que no están muertos54 Capítulo 54 Dándose a extrañar55 Capítulo 55 Una mujer de armas puestas 56 Capítulo 56 El encuentro57 Capítulo 57 Tirando a matar58 Capítulo 58 "El cuerpo sabe reconocer mejor"59 Capítulo 59 Un castigo para mi chica salvaje60 Capítulo 60 La vida es efímera 61 Capítulo 61 Un asunto a medias que resolver62 Capítulo 62 Nada como una buena acogida63 Capítulo 63 Todos felices64 Capítulo 64 Desear lo que es de otros 65 Capítulo 65 Modo Glacial, modo cálido 66 Capítulo 66 Pedazos de mi vida van brotando de mi mente67 Capítulo 67 Una añoranza de las mil y una noche68 Capítulo 68 "Cuidado con una mujer celosa es más peligrosa"69 Capítulo 69 "Donde estabas amor "70 Capítulo 70 Momentos inolvidables71 Capítulo 71 Los designios de la vida72 Capítulo 72 Intensificarse o disminuir 73 Capítulo 73 Prestar cuidado 74 Capítulo 74 Acecho75 Capítulo 75 La razón soy yo76 Capítulo 76 La gata heroína77 Capítulo 77 En busca de la confianza78 Capítulo 78 Un asunto sin acabar79 Capítulo 79 Un desafío es un desafio80 Capítulo 80 Morir antes que traicionar81 Capítulo 81 Una vida sin altibajos es una vida sin sabores82 Capítulo 82 El enojo de Agustín 83 Capítulo 83 Celos irremediables84 Capítulo 84 ¿Cuando cambié 85 Capítulo 85 Deseo puede ser fatal 86 Capítulo 86 Cobijados por la confianza 87 Capítulo 87 Nuevas emociones, juguete nuevo88 Capítulo 88 La hermana menor89 Capítulo 89 Estar en un error 90 Capítulo 90 Un problema es un problema91 Capítulo 91 Las lecciones de vida son caras.92 Capítulo 92 Conociendo a Casandra 93 Capítulo 93 Así se comienza todo, con una mirada94 Capítulo 94 Quiero merecerte95 Capítulo 95 Si quisiera tenerte ya rato lo hubiera dicho96 Capítulo 96 Casandra Davidson 97 Capítulo 97 Dando una lección 98 Capítulo 98 Siempre cobro lo que me deben99 Capítulo 99 Ser o no ser100 Capítulo 100 A cabalidad